Brasil salió de la recesión. Luego de dos trimestres consecutivos de caída de su PBI, produjo 1,9% más en el segundo trimestre que en el primero y, aunque cuando la comparación se hace con el mismo período del año pasado y así da un retroceso de 1,2%, los empresarios argentinos ya piensan cómo ganar participación en el floreciente mercado del principal socio del Mercosur.  En los primeros ocho meses del año, el déficit bilateral de Argentina con Brasil llegó a US$ 278 millones. De todas formas, en comparación con el año pasado, sigue siendo sustancialmente inferior: a esta altura de 2008, ya era de US$ 3.570 millones, por la caída del comercio asociada a la crisis internacional y las medidas de restricción a las importaciones. El interrogante que se abre es si la recuperación de las exportaciones argentinas hacia Brasil será lo suficientemente fuerte como para revertir el saldo comercial.  Dante Sica, director de Abeceb.com, celebró la noticia y destacó que las exportaciones argentinas a Brasil "reaccionan más a señales de ingreso que al tipo de cambio".  El ex secretario de Industria consideró que la recuperación de la economía brasileña impactará especialmente en las ventas locales de bienes industriales, ofreciendo una oportunidad para ganar inserción en el mercado brasileño tanto para el sector automotor y autopartista, como para el del plástico, la siderurgia y la petroquímica.  Además de atraer exportaciones argentinas, el fin de la recesión brasileña permitiría que continuara el proceso de internacionalización de las empresas del país vecino en el mercado local, a través de nuevos flujos de inversión extranjera directa.  En sintonía con Sica, el secretario de Relaciones Económicas Internacionales, Alfredo Chiaradía, consideró que "por definición, la recuperación de un vecino es buena noticia, y aún más si ese vecino es el principal socio comercial".  Respecto de la posibilidad de que el déficit que experimenta el comercio bilateral se revierta, Chiaradía evaluó que "resulta difícil de prever".  Con la llegada de la crisis internacional, la Argentina aplicó licencias no automáticas a diversos productos de importación, lo que originó quejas constantes por parte del empresariado brasileño, que amenazó con represalias. Si Brasil impusiera controles, peligraría la posibilidad de aprovechar la recuperación del país vecino por parte de los exportadores argentinos. Sin embargo, el embajador descartó tal posibilidad y aseguró que el tema "está contenido".  La economía brasileña es el principal destino para las exportaciones argentinas (ronda el 18% del total), por lo que la recesión del país vecino profundizaba la local. En 2008, Argentina le vendió a Brasil por más de US$ 13 mil millones, pero este año, por la crisis mundial, en los primeros siete meses no llegó a US$ 6 mil millones.Por C.L.I.  

FUENTE: Perfil y abeceb.com