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"Algunas inexactitudes" | ||
El motivo de esta carta es presentar una reflexión a partir del artículo "Pueblos originarios y los posteriores", del señor Roberto Porcel, miembro de la Academia Argentina de la Historia, publicado el viernes 14 de agosto en la sección Debates de este medio. Dejo para otros colegas más eruditos la corrección de varias inexactitudes históricas del autor. El punto a tratar aquí es el criterio sobre el cual el señor Porcel funda el derecho a reclamar tierras, considerando sólo el orden de llegada a los territorios en cuestión. Así manifiesta que: "Los mapuches que hoy habitan en Neuquén llegaron pacíficamente después de 1885, cuando fueron cruzando pacíficamente la cordillera, procedentes de Chile...". Este razonamiento pasa por alto que para el mundo nativo la cordillera jamás fue un límite internacional, por ser éste un concepto propio de la política moderna. Además desconoce que ese cruce era realizado en ambos sentidos en búsqueda de amparo de acuerdo con las vicisitudes de las campañas militares de Chile y Argentina, por lo que, en la época en que Porcel indica, muchas familias estaban en realidad volviendo a sus hogares. Para sintetizar mi reflexión, quiero señalar que los últimos en llegar a esta región (y de la manera más violenta) han sido los Estados nacionales argentino y chileno. El tiempo no tiene vuelta atrás, pero es lamentable que las injusticias y atropellos cometidos hace más de cien años continúen sin reparación. Peor aún, que la historia sea tomada para alimentar resentimientos en vez de ayudar a buscar alternativas de justicia y de convivencia. Hace tiempo leí una frase cuyo autor, lamentablemente, no recuerdo. Decía algo así como "Dios escribe la historia, pero los historiadores la modifican". Virginia Habegger, DNI 12.906.223 Lic. en Historia - Docente de la Univ. Nac. del Comahue Sección chacras - Cinco Saltos | ||
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