Rafael Nadal ya ha visto esta película y por lo que fue el desenlace de la primera parte no le debe gustar para nada la secuela. Por segundo año consecutivo, el español se ha visto frenado de jugar en el Abierto de Estados Unidos por culpa de la lluvia. El mal tiempo no dio tregua el viernes, dejando en suspenso el choque entre Nadal y el chileno Fernando González por los cuartos de final.

También en veremos se encuentran las dos semifinales del cuadro femenino: Serena Williams contra Kim Clijsters y Caroline Wozniacki ante Yanina Wickmayer La programación de la jornada debió haber arrancado a las 12.30 de la tarde (1630 GMT), hora de Nueva York, pero la lluvia no dio espacio para jugar.

Cuadrillas de trabajadores se esforzaban en vano por secar la cancha del estadio Arthur Ashe, la central del torneo, además de las dos secundarias. Sin embargo, cuando parecía que se podía jugar, la lluvia volvía con fuerza. A esto hay que sumarle el fuerte viento que soplaba, uno que doblaba con facilidad los paraguas de los concurrentes.

El plan de contingencia de los organizadores es que Nadal y González completen su partido el viernes, uno en el que el español tenía ventaja de un set y lideraba 3-2 en el desempate del segundo. La idea es que a la primera oportunidad posible los tres partidos se disputen al unísono. El Williams-Clijsters en el Ashe; el Nadal-González en el Louis Armstrong; y el Wozniacki y Wickmayer en el Grandstand.

"Hace tiempo que no pasaba por esto, sólo puedes ser paciente'', dijo Clijsters a la televisión. La belga recién regresó al circuito el mes pasado tras tomarse un sabático de dos años para casarse y dar a luz una bebé.

Nadal pasó por lo mismo el año pasado cuando la lluvia no le permitió terminar su choque de semifinales ante Andy Murray. A raíz de los coletazos de una tormenta tropical el año pasado, los organizadores decidieron, cuando se jugaba el segundo set de la semifinal entre Roger Federer y Novak Djokovic en la Ashe Stadium, que el Nadal-Murray se iniciase de inmediato en la adyacente Armstrong. Murray sacó ventaja antes que la lluvia impidiera que se completase y Nadal no pudo remontar al día siguiente.

Como coincidencia, Federer y Djokovic volverán a encontrarse este año en semifinales. El ganador del Nadal-González se citará con el argentino Juan Martín Del Potro. Cualquiera que gane entre Nadal y González encara la peor de las situaciones: jugar tres partidos en tres días para poder ganar el título.

También hay que ver el efecto que puede tener en ambos la interrupción. Nadal, en particular, es un interrogante por la condición de sus abdominales, donde le han puesto una tirita para aminorar el dolor en los músculos.

AP