Miércoles 09 de Septiembre de 2009 Edicion impresa pag. 16 > Municipales
Tensión durante un desalojo en la meseta neuquina
Ocupaban tierras destinadas a un plan de viviendas. Sacaron de allí a unas 30 personas de la zona oeste.

NEUQUÉN (AN).- Por orden judicial se llevó a cabo el desalojo en la zona de la meseta de la toma Hijos del Oeste donde desde la semana pasada se habían instalado unas 50 familias.

No hubo incidentes mayores sólo algunos roces entre los desalojados y los policías. Y un entredicho con un funcionario comunal que debió ser custodiado por los efectivos de la fuerza de seguridad.

Los usurpadores denunciaron que les hicieron "una cama" para restarles fuerza y desalojarlos más fácil.

La toma se ubicaba detrás del barrio Maronese en la zona alta de la meseta del oeste neuquino. En esas tierras alejadas un grupo de 50 familias se habían instalados y llevaban 10 días resistiendo entre negociaciones con el municipio y con la Policía.

Alrededor de las 9.10 de ayer unos 50 efectivos policiales, entre ellos grupos de choque y disuasivos como la Metropolitana y la Uespo, arribaron a la toma y tras ser notificados los usurpadores se inició el desalojo ordenado por el juez Cristian Piana.

"Al momento en que llegamos al lugar habían unas 30 personas que en su mayoría no ocasionaron mayores inconvenientes salvo casos aislados", explicó el comisario Daniel Rojas responsable de la Dirección de Seguridad de la policía neuquina.

Los usurpadores, en su mayoría jóvenes, manifestaron que "nos rompieron todo. Dos días estuve construyendo la casilla y la destruyeron por completo. Nosotros no vamos a ir a tomar un espacio verde por eso vinimos acá donde no jodemos a nadie", confió Marianella.

Por su parte, el delegado de la toma, Sergio Contreras, denunció que "nos hicieron una cama, nos dijeron que teníamos que ir a las 9 a la Dirección de Tierras y mientras estábamos allá nos enteramos que estaban desalojando", acusó el referente.

En tanto Juan German, responsable de Tierras del municipio de Neuquén, se acercó hasta la meseta donde recibió insultos y empujones de los tomadores quienes le recriminaron el accionar.

"Acá el 99,9 por ciento de los que tomaron son oportunistas, el resto tiene necesidades reales", explicó el funcionario quien sin embargo adelantó que el jueves a las 9 van a mantener una reunión con los usurpadores y "se priorizará a los que tengan mayor necesidad", recalcó el funcionario al ser consultado ayer por este diario.

De acuerdo a los primeros datos surgidos a raíz de esta ocupación ilegal trascendió que los terrenos en cuestión están destinados a la construcción de una plan de vivienda con fondos de la Nación.

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