En el "Río Negro" del sábado 5, así como en la televisión nacional, vimos cómo, en pleno temporal de nieve, un helicóptero rescató al pequeño Diego Currual en el paraje Arroyo Blanco, en el área rural de Pilcaniyeu. La noticia destacaba la sorpresa de los socorristas cuando desde el hospital rural les dieron las coordenadas de latitud y longitud, o sea la ubicación exacta en el mundo del rancho de los Currual. El helicóptero llegó derecho y sin inconvenientes y Diego salvó su vida gracias a, entre otras cosas, el GPS que se usó para georreferenciar su vivienda. "Tecnología apropiada", de acuerdo a las básicas definiciones de la Organización Mundial de la Salud, es tecnología aplicada en el primer nivel de atención, o sea atención primaria de la salud.
Hace muchos años, en 1984 para ser más precisos, durante una de las nevadas más grandes que se recuerdan ingresó a Pilcaniyeu una camioneta "que no era doble" y con las gomas medio lisas, como correspondía a un vehículo oficial de la época. A bordo un buen chofer y un par de profesionales con un ecógrafo portátil, una joya tecnológica para la época, propiedad del "ecografista", un porteño de Barrio Norte que se había pagado el pasaje para venir a Río Negro a probar una idea: utilizar por primera vez en el mundo la tecnología ecográfica para diagnosticar hidatidosis en el campo (reconocido homenaje al Dr. Bernardo Frider), o sea transformar un equipo sofisticado en "tecnología apropiada" para el primer nivel de atención, o sea atención primaria de la salud.
Claro, en esa época el hospital de Bariloche no tenía aún ecógrafo.
En esos días, y mientras los helicópteros recorrían el área rural de Pilcaniyeu llevando asistencia y alimentos, se ecografió a medio pueblo, a los chicos y a los puesteros de la estancia Pilcañeu, donde la nieve pasaba los alambrados. Imposible olvidar la sorpresa de Bernardo por el clima y la geografía. Cosas del destino. Uno de los primeros casos de hidatidosis asintomático diagnosticado en esos días, derivado al hospital de Bariloche y operado, fue un niño, Mario, que ahora, trabajando en el hospital de Pilcaniyeu, es el punto focal de apoyo para georreferenciar viviendas y el dueño del GPS, la tecnología utilizada para salvar a Diego.
Interesante, como es interesante recordar que, demostrada la utilidad de una tecnología para su aplicación en beneficio de "muchos", de costos iniciales accesibles y de ningún costo operativo para el servicio de salud, su aplicación y aprovechamiento por el "sistema" es una cuesta empinada de remontar.
Hoy, nadie sería capaz de negar no ya la utilidad sino la necesidad de tener un ecógrafo en cada hospital rural, manejado por un médico generalista en la misma forma en que maneja el estetoscopio. Pero tardamos más de 10 años en disponer de un ecógrafo móvil propio, que se provean ecógrafos a los hospitales rurales y que se entrene al personal en su uso. Recuerda la historia que el hospital de Los Menucos fue el primero en conseguir en la Línea Sur un ecógrafo, donado por algún legislador, y también fue el primero que durante años lo tuvo que mantener guardado porque no se autorizaba la capacitación al médico del hospital "porque no era tecnología para un hospital rural".
Hoy, todos los años hacemos en el hospital de Jacobacci un curso "de ecografía rural" para residentes y médicos generalistas. Todos los hospitales de la Línea Sur pueden aprovechar esta tecnología en beneficio de "muchos".
Volviendo al GPS, hace ya unos años desde Salud Ambiental, siempre integrados al primer nivel de atención, largamos la idea de georreferenciar viviendas rurales y huellas para facilitarle la cartografía a cada hospital rural, a cada agente sanitario, además de, obviamente, mejorar la calidad de nuestros propios programas. Empezamos con siete GPS básicos, baratos (blanco y negro y sin pantalla táctil).
Hoy tenemos ya 1.317 viviendas rurales con sus datos de latitud y longitud y una gran parte de las huellas rurales que deben ser transitadas para llegar a cada una de esas viviendas (¡no siempre hay helicópteros disponibles!). La Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae) puede darnos imágenes satelitales en tiempo real en caso de desastres naturales, justamente como las nevadas; podríamos tener identificadas aquellas en donde hay una embarazada cerca de parir para llegar en su búsqueda a tiempo sin equivocar el camino. Y muchas cosas más. Se llama Sistema de Información Geográfico y es "tecnología apropiada", o sea atención primaria de la salud, pero aún escasamente pueden utilizarlo nuestros hospitales.
Como el ecógrafo en 1984, la tecnología esta disponible, pero la cuesta es empinada. Hacen falta computadoras en atención primaria, pero en época de ajustes el primer renglón suprimido es siempre el de las computadoras "tecnologías no prioritarias"? Hace falta capacitar a médicos rurales y agentes sanitarios para que usen el sistema. Hace falta, en síntesis, "creer" que en el primer nivel de atención se puede trabajar con buenas tecnologías y mejorar la situación y las oportunidades de "muchos" y a bajo costo.
¿Es utópico pensar en centros de salud y agentes sanitarios rurales conectados, vía internet, con sus hospitales rurales y a los hospitales rurales conectados con los hospitales de referencia y sus jefes de servicios? Comunicación barata, eficiente y continua, sin cupos telefónicos. No todos los problemas para llevar profesionales a la Línea Sur son salariales. También es hacerles sentir que no son "deportados" al fin del mundo sino que son parte de él y que pueden solucionar problemas en áreas remotas aprovechando los desarrollos del siglo XXI.
No es utópico, San Luis lo tiene, toda una provincia con internet inalámbrica (Wi-Fi) oficial. Se puede, como no era utópico pensar en 1984 que en el futuro habría ecógrafos en todos los hospitales rurales y ecógrafos móviles para atender en los puestos sanitarios en el medio del campo y con la nieve. Y con ello muchos Marios y Diegos pueden tener más oportunidades en la vida
EDMUNDO LARRIEU (*)
Especial para "Río Negro"
(*) Doctor en Epidemiología.
Coordinador Provincial de Salud Ambiental de Río Negro