JERUSALÉN.- El Ministerio israelí de Defensa aprobó ayer la construcción de 455 nuevas unidades de vivienda e instalaciones deportivas en varios de sus asentamientos en los territorios palestinos ocupados de Cisjordania.
La aprobación del ministro de Defensa israelí, Ehud Barak, se conocía desde ayer, pero no fue hecha oficial hasta ayer, coincidiendo con los preparativos de la visita a Israel del enviado especial de EE. UU. para Cercano Oriente, George Mitchell. El anuncio despertó reacciones de las autoridades palestinas, que lo consideraron "inaceptable" y una "provocación".
Del total de 455 viviendas judías que serán construidas en Cisjordania, los asentamientos de Gush Etzion y Har Gilo, al sur de Jerusalén, serán los que reciban mayor número de permisos y construirán hasta 149 casas.
Por su parte, en Maaleh Adumim y en Ariel, los mayores asentamientos israelíes en Cisjordania, se construirán respectivamente 89 viviendas y un parque con instalaciones deportivas.
El Ministerio de Defensa israelí, que controla por ley las construcciones en las zonas de Judea y Samaría, dio además luz verde a la ampliación de poblaciones ultraortodoxas judías en territorios palestinos ocupados, como Modiin Illit, donde se construirán 84 viviendas nuevas.
Una de las partes más polémicas del plan israelí consiste en la construcción de 20 casas en el asentamiento de Maskiyot, situado al Este de la ciudad cisjordana de Nablus en el Valle del Jordán. Hasta el momento este asentamiento consistía en un puesto militar y una academia religiosa. La construcción de viviendas supondría, según los palestinos, la construcción del primer asentamiento formal por parte de Israel en 13 años.
Barak dio a conocer su proyecto a pocos días de la llegada de Mitchell a Israel, que se reunirá este sábado con el primer ministro Benjamin Netanyahu para la posible firma de un acuerdo sobre la programada congelación de los asentamientos.
Estados Unidos exige desde la llegada de Barack Obama al poder la completa paralización de las construcciones, mientras que Israel insiste en seguir construyendo al menos en las ya existentes para responder al llamado "crecimiento natural". Israel pretende rebajar la tensión con Estados Unidos mediante la firma del nuevo acuerdo.
El texto no contiene sin embargo un compromiso para "congelar" por completo las construcciones y apuesta por "reducir la escala de construcciones", informó el diario israelí "Haaretz".
El anuncio del ministro de Defensa israelí podría marcar el resultado de la visita de Mitchell, uno de los últimos encuentros que mantendrá Netanyahu antes de viajar a Nueva York para la celebración de la Asamblea General de las ONU, donde las partes negociadoras esperan acercar posiciones entre israelíes y palestinos para el inicio de nuevas negociaciones de paz. (DPA)