SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La presente temporada invernal quedará en la historia como la peor en décadas, tanto por el clima adverso, la crisis económica y el temor a la gripe A, cuya combinación redujo drásticamente la cantidad de turistas.

En particular lo sufrieron los hoteles de mayor categoría, por la falta de visitantes extranjeros, y también las cabañas y bungalows, donde se alojan los esquiadores que este año no vinieron.

El turismo extranjero se redujo en más del 50% con respecto al año anterior y el de Brasil bajó un 70%. El informe oficial de la encuesta de coyuntura hotelera determinó que en julio, el principal mes de arribo de turistas a Bariloche, la ocupación alcanzó apenas el 46% de las plazas disponibles, una cifra inédita para la ciudad. Las estadísticas oficiales fueron dadas a conocer con el documento final de la encuesta de coyuntura hotelera que se releva en todos los establecimientos hoteleros habilitados en la ciudad para determinar el nivel de ocupación.

El mes de julio había comenzado con una baja ocupación hotelera estimada en el 30% según el sector empresarial, pero repuntó con el inicio de las vacaciones de invierno de los principales conglomerados urbanos y finalmente el promedio mensual fue del 46%.

El nivel de ocupación hotelera es el más bajo de los últimos años debido a que en el mismo mes del año pasado se registró una ocupación del 69%, mientras que en el mismo mes en 2007 y 2006 la cifra se mantuvo en el 74%.

El arribo de pasajeros ese mes fue de 78.234 visitantes de los cuáles sólo 780 lo hicieron por tren, 2.350 por vía náutica a través de la excursión del Cruce de Lagos proveniente de Chile, y 38.953 pasajeros lo hicieron por avión.

La caída de turistas que llegaron en ómnibus fue estrepitosa con un total de 36.151 pasajeros en julio de este año, en comparación con los más de 75.000 que lo hicieron por la misma vía en 2008.

El sector que menos sufrió la falta de visitantes es el correspondiente al turismo estudiantil, donde tuvieron que ser reprogramados los viajes durante el mes de julio, por la problemática de la gripe A. Los operadores informaron que visitarán la ciudad más de cien mil jóvenes, lo cual permite que una importante cantidad de trabajadores gastronómicos conserven sus puestos de trabajo.