NEUQUÉN (AN-ACE).- Los defensores cuestionaron que una hermana de un desaparecido se presente como querellante en la causa, por entender que sólo están habilitados los padres o descendientes de las víctimas. "Si aceptan este planteo estricto, los desaparecidos quedarían como dijo Videla: no son ni vivos ni muertos ni nada, y nadie puede querellar por ellos", fustigó Noemí Labrune.

La representante de la APDH Neuquén aseguró que excluir a los organismos defensores de los derechos humanos de las causas que tramitan los delitos cometidos durante el terrorismo de Estado sería "un retroceso tremendo" en el avance judicial y de jurisprudencia lograda en los últimos años.

Respecto al planteo de los defensores en la causa neuquina, Labrune puso énfasis en el ataque "a una querellante particular, que es hermana de un desaparecido".

Por la juventud de las víctimas del terrorismo de Estado durante la última dictadura, muchos no tuvieron hijos; "y como han pasado más de 30 años, quedan pocos padres que sobrevivan; en esto se debe aplicar el sentido amplio de la defensa de los derechos humanos y del derecho de gentes", finalizó.