Viernes 04 de Septiembre de 2009 Edicion impresa pag. 30 > Sociedad
Polémica por accidente en una procesión

CHIMPAY (AVM).- Lilia Pauli tiene 28 años y sufre desde hace tiempo una hemiplejía, producto de un accidente cerebro vascular, que le dejó secuelas serias en su pierna izquierda. Y ahora por un accidente sufrido durante la procesión de Ceferino Namuncurá tiene afectada su pierna derecha.

El domingo pasado Lilia, junto con su hija de 4 años y su madre participaban de la procesión cuando fue atropellada por una camioneta que manejaba un joven de la organización del evento religioso. Según la mujer, quien manejaba no se habría detenido, aunque desde el obispado negaron que el abandono de persona hubiera existido y relativizaron la magnitud del accidente.

Lilia indicó que se comunicó con el obispo Esteban Laxague y que éste le dijo que como no había quebradura no había pasado casi nada.

Según relató Lilia a este medio, "íbamos caminado por la avenida Laure, en la procesión hacia el parque, cuando sentí un golpe desde atrás. Primero caí sobre el capot de la camioneta y después al piso, y cuando caí al piso me pisó la pierna derecha. Pero no paró, siguió andando. También se cayeron mi hija y mi mamá. Mi hija tuvo un golpe en la cabeza y no paraba de llorar".

Por su parte, desde el obispado de Viedma, una persona que se identificó como Fabián afirmó que "el obispo no está en este momento pero tiene conocimiento del caso. El tema no es así, porque cuando sucedió se la asistió de manera inmediata, llamando a la ambulancia y llevándola hasta el hospital. Pero además se comprobó que no tenía fracturas. Por otro lado ayer -por el miércoles- el propio obispo la llamó para preguntarle cómo estaba".

El hombre sostuvo también que "la camioneta no es del obispado sino que era parte de la organización de la procesión. Pero además no puede ser que la haya levantado como ella dice dado que se transita a paso de hombre mientras se hace la procesión".

Lilia mencionó que radicó la denuncia en la subcomisaría de la localidad, luego de ser asistida en el hospital. En el centro asistencial, después de hacerle placas dictaminaron que si bien no tenía quebraduras si había recibido fuertes golpes que le provocaron grandes hematomas en la pierna izquierda.

Para paliar los dolores y bajar la inflamación le recetaron medicamentos que tienen un costo de 100 pesos. "En ningún momento recibí ayuda de ellos para nada y esto es lo que más bronca me da", afirmó.

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