En medio del enfrentamiento con el Grupo Clarín, el gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, a través del Comfer, negó ayer el permiso de fusión de las señales de cable Cablevisión y Multicanal, medida que fue calificada de "arbitraria" e "ilegal" por parte de la empresa.
La decisión fue anunciada por el titular del Comité Federal de Radiodifusión (Comfer), Gabriel Mariotto, en el Congreso, adonde concurrió para informar sobre la nueva Ley de Medios que impulsa el gobierno. "Antes de venir, firmé la resolución denegando el permiso que pidió Cablevisión para operar en conjunto con Multicanal", dijo Mariotto.
Desde la empresa, se emitió un comunicado en el que "la resolución aludida carece de toda lógica y sustento legal".
"Por todo esto -continuó Cablevisión- resulta aún más arbitraria, intempestiva e ilegal la resolución anunciada en el día de la fecha. Y por todo esto Cablevisión iniciará, una vez más, todas las acciones administrativas y judiciales que sean necesarias para resguardar sus derechos constitucionales y los de todos sus clientes". Por último, la compañía expresó que "como sucedió hace menos de un mes con Fibertel, Cablevisión vuelve a ser víctima del abuso y el autoritarismo de quienes, al margen de la ley, pretenden no ejercer su función pública, sino utilizarla como un ariete político para esconder sus verdaderos intereses".
Hace pocos días, la Corte Suprema de Justicia había avalado esa fusión, al no encontrar objeciones jurídicas al reclamo.
La fusión de las empresas se dio en 2007, una semana antes de que Néstor Kirchner dejara el Ejecutivo en manos de su esposa. En ese momento y con la firma del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, el gobierno nacional aprobó la adquisición de Multicanal por parte de CableVisión, dando lugar al mayor operador de cable de la Argentina y a uno de los principales de la región. (DyN)
