VIEDMA (AV).- A cinco años de prisión y por el delito de "abuso sexual" fue condenado un hombre mayor de 65 años, abuelastro de una nena de ocho años. La sentencia coincidió con el pedido que había formulado en los alegatos el fiscal de Cámara, Juan Ramón Peralta.

El abogado defensor Carlos Dvorzak adelantó a "Río Negro" que casará la sentencia por "arbitraria", al considerar que el Tribunal integrado por los jueces Pablo Estrabou, Francisco Cerdera y Jorge Bustamante han incurrido en una gravedad institucional. En este sentido destacó que la nena "está intacta física y psicológicamente. No tiene daño ni síntomas de haber sido abusada", y agregó que hasta "es abandera en la escuela". Además reiteró sus críticas sostenidas en el debate en relación a la invalidez de la Cámara Gesell.

El imputado de Sierra Grande, cuya identidad no se da a conocer para evitar la identificación de la criatura, permanece en libertad. Pero de ser confirmada esta sentencia por el Superior Tribunal de Justicia deberá ir a prisión.

En los alegatos el fiscal Juan Peralta había solicitado una pena de cinco años de prisión contra el imputado por interpretar que es responsable del delito de "abuso sexual sin penetración" del que resultó víctima una nena de ocho años, de quien este hombre es el abuelastro.

Peralta basó su acusación en los dichos de la niña a través de la Cámara Gesell, en los informes técnicos de esa declaración grabada con la participación de una sicóloga, los testimonios de la ex madrastra de la criatura a quien la nena le contó por primera vez lo sucedido, así como el del abuelo materno de la niña que fue quien denunció el hecho.

La nena con su hermanito vivía con sus padres en Viedma hasta 2005 cuando falleció la madre de ambos. En esa oportunidad su papá decidió regresar a Sierra Grande junto a su madre y el concubino de ella que lo crió como si fuera su hijo, según sus propios dichos en el debate. Desde ese momento y hasta fines de 2007 en que se radicó la denuncia, la niña habría sido víctima de su abuelastro.