El cordobés José María López (Mondeo) consiguió en La Rioja su quinta pole consecutiva en el Top Race tras obtener el mejor registro de las controvertidas tandas de clasificación llevadas a cabo hoy en el autódromo que lleva el nombre de esta capital provincial, por la tercera y última fecha de la Etapa de Invierno.

De esta manera, el piloto de Río Tercero, que cerró su mejor giro en 1:16.559, partirá por el lado de la cuerda en la primera serie nada menos que junto al "Pato" Juan Manuel Silva (Mercedes), con quien aún no solucionó los problemas derivados de la relación entre ambos en el equipo Honda de TC 2000.

Seguramente, esa batería será una de las grandes atracciones de la jornada dominguera del Top Race. En tanto, la segunda serie será encabezada por el bicampeón Emiliano Spataro (Passat), segundo de la clasificación y quien tuvo uno de los duelos más picantes de aquellas tandas con Leonel Pernía (Mercedes), y Agustín Canapino (Mercedes).

Más atrás terminaron Brian Smith (Peugeot 407), Norberto Fontana (Passat), Diego Aventin (Mondeo), Juan Cruz Alvarez (Mercedes), Omar Martínez (Mondeo) y Guido Falaschi (Mondeo).

Bajo un sol imponente que convirtió al autódromo en un verdadero horno al aire libre, López se adjudicó finalmente una clasificación por demás reñida, cuya posición de privilegio cambió de mando varias veces, sobre todo en la tanda inicial, que terminó en poder de Spataro.

Es que había sido Aventin quien se había puesto al frente de la clasificación en base a una gran vuelta rápida que luego fue superada por un excelente giro de Norberto Fontana y luego por una extraordinaria performance de Spataro.

Pero en la tanda decisiva, "Pechito" apareció en todo su esplendor demostrando sus dotes conductivas y se apoderó de una nueva pole, que le permite encarar con mayor tranquilidad la jornada de mañana, en la cual intentará conseguir un resultado favorable para quedar primero en la Etapa de Invierno.

Con la pole del cordobés casi consumada desde su vuelta más veloz, el resto de los pilotos intentó mejorar pero nunca pudo alcanzarlo. Y quizás por el malestar que eso generaba o por el calor (muchísimo en los habitáculos), a muchos de los pilotos los nervios comenzaron a jugarle una mala pasada. Así, Spataro y Pernía, que finalmente se clasificó decimosexto, tuvieron un par de encontronazos en pista (luego ambos admitieron que se taparon a propósito sendas vueltas rápidas) que luego derivaron en un cruce muy caliente en el box del piloto de Lanús.