NEUQUÉN (AN).- El achique de estructuras que anunció el gobernador Jorge Sapag se plasmará en un organigrama con seis ministerios y cuatro secretarías de Estado. El nuevo esquema incorporará el área de Coordinación y dos carteras dejarán de ser autónomas: Salud, y Justicia Trabajo y Seguridad. La primera bajará de rango y la segunda se dividirá entre el ministerio de Gobierno y una secretaría.

Se mantendrán los ministerios de Hacienda, Desarrollo Social y Desarrollo Territorial. El de Gobierno, Educación y Cultura mutaría a Gobierno y Justicia, donde también se mantendría Derechos Humanos. Educación pasaría a ser una Secretaría de Estado, al igual que Salud, Seguridad y Gestión Pública y Contrataciones.

A estos cuatro ministerios se sumarán el de Coordinación y el ascenso de la Secretaría de Estado de Recursos Naturales, que será ministerio y que mantendrá a Guillermo Coco como máximo referente.

La reforma de las estructuras fue anunciada por Sapag hace una semana. La cuenta regresiva para aplicarla comenzará a correr el lunes. "Enviaremos la ley de ministerios en la semana del 31 de agosto", había anticipado el gobernador. Y dijo "en la semana", por cualquier eventualidad, pero la reestructuración avanzó sin problemas y se confirmaría en cuestión de días. También los nombres, que no incluirían tantas caras nuevas, ya que la estrategia sería aplicar todos los cambios de una vez y dar vuelta la página.

Al cierre de esta edición, la ley no había sido enviada a la Legislatura, pero era uno de los lugares en donde la esperaban con ansias. De allí se filtraron algunos datos, aunque fue trabajada a puertas cerradas, como uno de los secretos más fuertes en lo que va de la gestión, por dos de los funcionarios de confianza de Sapag: Rodolfo Laffitte y Zulma Reyna.

Los cambios que en los próximos días anunciará Sapag dejarán heridos en el actual gabinete. Uno de ellos sería el ministro de Salud, Daniel Vincent, que se quedaría fuera de la estructura. Gustavo Curtino, actual subsecretario, se haría cargo de la secretaría. Quien también saldría afectada sería la subsecretaria de Educación y presidenta del CPE, Patricia Ruiz. En este caso también hay una posible reemplazante: una empleada de carrera de Educación, zapalina, que hasta hace poco tiempo estuvo a cargo del distrito de esa localidad y que renunció para pasar a colaborar con Tobares.

Los rumores señalaron a Coco como figura de cambio para la mayoría de los ministerios. Sonó para Gobierno y para Coordinación, dada la cercanía con el gobernador, y finalmente se mantendrá en Recursos Naturales, aunque fortalecido como ministerio y con el control directo de los servicios públicos, entre ellos, el EPAS y el EPEN, que controla desde principios de año cuando Sapag las sacó del ámbito de Hacienda.

Entre los que se quedan Leandro Bertoya lograría mantener el espacio. Cesar Pérez dejará justicia y seguridad -la primera pasaría al área de Tobares y la segunda recibiría el rango de secretaría- y se hará cargo de Desarrollo Social.

Laffitte seguiría al frente de la secretaría de Estado de Gestión Pública y Contrataciones, mientras que en el nuevo organigrama no estaría contemplada la secretaría de Control de Gestión de Zulma Reyna. Es improbable que Sapag vaya a prescindir del aporte de la funcionaria, sobre todo teniendo en cuenta que le asignó junto con Laffitte la tarea de reorganizar el organigrama. En la nueva estructura muchos nombres se postularon para Coordinación, pero el de Reina es el más firme.