SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El Ejecutivo municipal libró esta semana 40 intimaciones a comercios y empresas del cerro Catedral que se negaron a pagar la nueva tasa de Servicios y entre hoy y mañana podría disponer las primeras clausuras.

La tasa vigente desde este año en el centro invernal tiene sólo dos vencimientos anuales. El primero operó en julio pasado y acumula numerosos incumplimientos.

La virtual rebelión de los contribuyentes está ligada con la demanda por inconstitucionalidad que muchos de ellos presentaron contra la norma que fijó el gravamen, al que consideran desproporcionado y confiscatorio.

El delegado municipal en Catedral, Alejandro Popovici, confirmó ayer que emitieron las primeras intimaciones a los comercios deudores, con "plazos cortos" para que cumplimenten el pago.

El municipio les advirtió que de no regularizar su situación quedarán expuestos a las sanciones previstas en la ordenanza, que les impide renovar su habilitación comercial.

El secretario de Economía y Gobierno, Federico Lutz, dijo que los contribuyentes deudores se exponen a sufrir la clausura de sus locales "y si continúan con la actividad, el siguiente paso es la denuncia penal por violación de clausura".

El municipio tenía previsto recaudar por la tasa de Servicios en el cerro unos 650 mil pesos anuales. Hasta fines de julio había percibido 252 mil pesos. Los montos facturados en cada caso son muy variables y dependen de la actividad comercial desarrollada y el volumen del emprendimiento.

La empresa Capsa (que tiene a su cargo la concesión provincial de los medios de elevación) es por lejos la principal contribuyente y debe abonar algo más de 200 mil pesos anuales.

Según Lutz, Capsa no pagó la tasa y presentó un escrito de rechazo. El perjuicio contra el municipio por esa reticencia de la empresa se agrava por la imposibilidad de percibir el 10% del canon anual que la empresa debe pagar a la provincia por la concesión y que tampoco saldó en término.

Los directivos de Capsa pidieron contemplación y flexibilidad ante caída de la actividad turística.

Lutz dijo en contraste que el municipio también tiene problemas, "pero prestó los servicios de acuerdo a lo comprometido y no le echó la culpa a la recaudación".