El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, renovó hoy sus durísimas críticas contra la instalación de bases militares estadounidenses en Colombia, y les advirtió a los mandatarios de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), que se reúnen mañana en Bariloche, que la iniciativa es un proyecto del "imperio americano" para "acabar" con el bloque regional.
En una solicitada publicada en matutinos porteños, Chávez, quien ayer había calificado a Colombia como un "narcoestado", acusó a la Casa Blanca de pretender "restaurar la dominación imperial en todos los ámbitos de la vida de nuestras sociedades", tras volver a embestir contra la ubicación en suelo colombiano de "al menos, siete bases militares norteamericanas".
"Queremos denunciar, aquí y ahora, que este hecho es parte de un plan político y militar orquestado para acabar con el proyecto de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), además de ser la más grande amenaza en este momento histórico para las infinitas riquezas que yacen en nuestro continente", alertó el mandatario.
La presidenta Cristina Fernández llegará esta noche a Bariloche para participar en la cumbre extraordinaria de jefes y jefas de Estado de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), que tratará la polémica cuestión de las bases militares.
Organizaciones políticas y sociales tienen previsto realizar manifestaciones en la zona céntrica de esa ciudad patagónica para expresar su repudio al proyecto.
En la solicitada difundida hoy, el presidente venezolano alertó que "es evidente que, ante los avances progresistas y democráticos en nuestro continente, el imperio norteamericano -que en los últimos cien años ejerció su hegemonía sobre la vida de nuestras repúblicas- ha iniciado una contraofensiva antihistórica y retrógrada con el propósito de revertir la unión, la soberanía y la democracia en nuestro continente".
"Esta contraofensiva se inició el 28 de junio de este año con el perverso Golpe de Estado cometido en la hermana Patria hondureña.
Dicen los militares golpistas de Honduras y los poderosos voceros conservadores de Washington que esta operación contra el presidente Zelaya fue una maniobra pensada en función de destruir la Alianza Bolivariana de los Pueblos de Nuestra América (ALBA)", prosiguió.
Más adelante, Chávez insistió en advertir sobre las consecuencias que, a su juicio, traería para la región la instalación de las bases militares en Colombia. "Llegó la hora de Suramérica, la hora de UNASUR, confiamos en la capacidad política de nuestra naciente unión para enfrentar en la actualidad esta amenaza que compromete el porvenir de nuestras repúblicas, el porvenir de nuestros Pueblos y el porvenir de toda la humanidad", enfatizó.
DyN
