El jefe del Gobierno porteño, Mauricio Macri, insistió ayer en que el renunciante jefe de la policía metropolitana Jorge "Fino" Palacios dimitió como consecuencia del "estado de ánimo" adverso que le generaban las "agresiones" que venía recibiendo de numerosos sectores que lo cuestionaron.
Afirmó que mientras el subjefe de la policía, Osvaldo Chamorro, "toma la posta" del funcionario renunciante, y "con tiempo buscaremos a una persona que reúna las mismas cualidades que Palacios.
Macri, en declaraciones a la prensa antes de participar de un encuentro organizado por el Consejo de las Americas en el Alvear Palace Hotel, exhortó a los porteños a "cuidar a la policía metropolitana, que no es la policía de Macri".
"La agresión que recibió Palacios seguramente debe haber sido determinante en su estado de ánimo. En general, a todo lo que se dijo alrededor del tema sin esperar que la Justicia se pronunciase en esa dirección", indicó.
Según el jefe comunal, "fue una decisión personal de él. El adujo razones personales y no querer complicar el lanzamiento y el funcionamiento de la Policía Metropolitana, donde él ha puesto mucho trabajo, mucho esfuerzo". "Ha sido un costo para la Policía Metropolitana, porque Palacios, sin dudas, lo ratifico, es un excelente profesional, no sólo en sus características técnicas sino también morales", aseguró.
Para Macri, "hemos perdido a un gran elemento, el más condecorado de los últimos veinte años, inclusive por la comunidad judía, la DAIA y el Estado de Israel. Lamentamos mucho su salida". "La carta de él dice que lo hizo por razones personales y para no obstaculizar el lanzamiento de la Policía Metropolitana, que es la prioridad de este gobierno: una fuerza que recupere el respeto y el entusiasmo de la gente alrededor de su propia policía", añadió.
El jefe de Gobierno aseveró que "por eso le pedimos a la comunidad, a la sociedad porteña, que cuidemos la Policía Metropolitana, que no es la policía de Macri, es la policía de todos los vecinos". (DyN)
