El temporal de lluvias y nevadas que castiga a la región desde hace días ocasionó que varias familias de El Manso Medio e Inferior quedaran aisladas por el desborde de arroyos y anegamiento de caminos, dificultando la salida hacia El Bolsón y Bariloche, lugares habituales de aprovisionamiento.
En el lugar están trabajando funcionarios de Defensa Civil y del Escuadrón 35° de Gendarmería Nacional, tratando de asistir con camiones de mayor porte a los pobladores que puedan tener algun problema de salud o de abastecimiento.
En tal sentido, los mismos damnificados piensan elevar una nota al gobernador rionegrino Miguel Saiz pidiendo que el presupuesto del año venidero contemple obras indispensables de contención.
En tanto, las calles y avenidas de El Bolsón se han trasnformado en verdaderos ríos y la situación comenzó esta tarde a complicar a pobladores ribereños de los ríos Azul y Quemquemtreu, cuyos cauces se están desbordando.
Asimismo, vecinos residentes al oeste de la pasarela del río Azul (unas 20 familias), confirmaron que la fuerza de las aguas rompió defensas y están aislados, sin que sus hijos puedan concurrir a la escuela y sin posibilidades de que ingrese ayuda sanitaria, ya que el otro puente (a la altura del paraje Entre Ríos –dentro de la provincia del Chubut-), presenta condiciones similares.
En la Comarca Andina se registran lluvias desde hace más de 30 horas, con el agravante de que las temperaturas han subido hasta cerca de los 10° y se esta derritiendo rápidamente la nieve de las altas cumbres.
Encima, la deforestación, el sobre pastoreo y los incendios estivales en las cabeceras de cuencas inciden en la retención del material natural, que baja sin obstáculos hasta los sectores más bajos de los valles intermontanos.
En El Bolsón, al igual que durante las inclemencias del pasado 22 de mayo, los sectores más complicados por la creciente del río Quemquemtreu están en el barrio Luján, en el acceso norte, donde los vecinos se quejaron hoy de que “no se hicieron los trabajos mínimos de contención, y ahora estamos con el corazón en la boca esperando que esta noche el agua otra vez nos pase por arriba”.
En forma urgente pidieron “que vengan los bomberos y Defensa Civil, que traigan máquinas para tirar material en las orillas más complicadas”.
El pronóstico indica que lloverá con distinta intensidad hasta el fin de semana, por cuanto los organismos seguirán monitoreando la situación de los cauces hídricos en forma permanente. Del lado chubutense, las riberas de los ríos Epuyén (en el barrio El Sauzal, en El Hoyo) y Azul, cerca del Parque Nacional Lago Puelo, mostraban que las aguas seguían en aumento.
Fernando Bonansea fernandobonansea@yahoo.com.ar