Tras meses de relaciones congeladas, Corea del Sur y del Norte volvieron a reunirse al más alto nivel, con la recepción por parte del presidente conservador surcoreano, Lee Myung Bak, de enviados de su país vecino por primera vez desde que asumiera el cargo hace un año y medio.

A través de sus enviados, el líder norcoreano Kim Jong Il manifestó su deseo de mejorar las relaciones con Corea del Sur, informó un portavoz de Seúl. Oficialmente, los enviados viajaron a Corea del Sur para el funeral del ex presidente surcoreano Kim Dae Jung, fallecido el martes pasado, al que asistieron miles de personas de ambos países. En los pasados meses las relaciones entre ambos países fueron muy tensas.