NEUQUÉN (AN).- En la elección de ayer hubo ganadores sin título: el Movimiento Popular Neuquino (MPN) salió primero pero perdió el control del Concejo Deliberante, y el intendente Martín Farizano sumó votos ajenos para celebrar un triunfo que reacomoda las piezas de una colación que ahora tiene un integrante de peso, Mariano Mansilla de Unión de los Neuquinos (Une).

El partido provincial perdió dos de los cinco concejales que puso en juego y Une se los arrebató: desde el 10 de diciembre, esta fuerza política que cuenta con el respaldo de la CTA neuquina tendrá cuatro concejales, con Mansilla a la cabeza. También sumó Recrear un concejal al bloque unipersonal de Marcelo Bermúdez y Juntos por la Ciudad, la alianza más próxima a Farizano, perdió una de las tres bancas que arriesgaba.

En el único lugar donde hubo fiesta en serio fue en el local partidario de Mansilla, que quedó apenas 200 votos por debajo de lista que encabezaba Luis Jalil.

"Vamos a seguir gobernando como hasta ahora, aunque estamos mejor posicionados", dijo Farizano a "Río Negro" que, antes de medianoche, saludó a Mansilla, al que reconoció como "una figura muy potente" que emerge tras este resultado.

La participación en las urnas fue muy baja, de apenas el 55% del electorado. El MPN obtuvo el 23,16% de los votos (20.421) y tres bancas. El partido provincial encontró ayer un nuevo piso porque nunca antes el respaldo obtenido en las urnas cayó por debajo del 30%.

Jalil, al hablar tras conocerse los resultados, dijo que el MPN "ganó otra elección". El concejal, que repetirá otro mandato a partir del 10 de diciembre, fue el último en hablar con la prensa.

En segundo lugar se ubicó Une con el 22,92% (20.215 votos). La lista consiguió dos lugares en la futura composición del Deliberante.

Junto por la Ciudad salió tercero con el 17,26% de los sufragios (15.221) y el cuarto puesto fue para Recrear con 9.298 votos (10,54%). Muy cerca se ubicó Libres del Sur con 8.557 sufragios (9,70%).

La elección de ayer cierra el calendario electoral de este año y deja posicionados a dirigentes que tienen aspiraciones para gobernar la ciudad en 2011.

El MPN tenía expectativas en el resultado de ayer: el oficialismo provincial tomaba esta elección como el escalón para iniciar un plan de recuperación del control en la ciudad donde no gobierna desde 1999.

Mansilla, el candidato quedó a 206 votos del MPN, en una frase de ocasión, dijo anoche que no piensa ni en la intendencia ni en la gobernación.

Sin embargo, en la conferencia de prensa convocó a disputarle el poder al MPN en el 2011. Mansilla no hablaba de la ciudad sino de pelear el poder en la provincia.