BUENOS AIRES (DyN).- El canciller Jorge Taiana viajará hoy desde Miami a Honduras para participar de una misión que buscará una solución a la crisis en ese país a raíz del golpe de Estado que el 28 de junio desalojó del poder al presidente Manuel Zelaya.
La delegación dispuesta por la Organización de Estados Americanos (OEA) estará integrada, además de Taiana, por los cancilleres de Canadá, Costa Rica, Jamaica, México, Panamá y República Dominicana, y por el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza.
Según consignaron agencias internacionales, el objetivo oficial de la misión es que el gobierno de facto de Roberto Micheletti acate los acuerdos del Pacto de San José de Costa Rica que implicarían el retorno del depuesto presidente Zelaya.
Anoche, el grupo de funcionarios mantenía una reunión preparatoria convocada por la OEA, en la ciudad de Miami. Hoy, en tanto, la delegación partirá a Tegucigalpa en medio de un fuerte operativo de seguridad y con el objetivo de llevar adelante una agenda que "no se limitará sólo al ámbito público".
De este modo, se informó que la comisión mantendrá reuniones con "representantes de la Iglesia Católica, las Iglesias Evangélicas, los empresarios, los trabajadores, los candidatos presidenciales y distintas organizaciones de la sociedad civil".
"Esperamos encontrar una acogida positiva al Acuerdo de San José, como único camino para alcanzar, al mismo tiempo, el retorno a una plena democracia y la reconciliación entre todos los hondureños", sostuvo Insulza.
Honduras sufrió un golpe de Estado el 28 de junio, a cargo de Micheletti quien, por ese accionar, fue condenado por los países latinoamericanos, Estados Unidos y la Unión Europea.
El presidente de facto y la cúpula política hondureña insisten en que el retorno de Zelaya es "inaceptable" y consideran que las elecciones presidenciales del 29 de noviembre generarán la legitimidad democrática al próximo gobierno. Por su parte, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) realizó una visita a Honduras para observar la situación de derechos humanos en el país caribeño.
La CIDH criticó duramente la "violación" de las garantías individuales por parte del gobierno de facto. Así, confirmó la existencia de un "patrón de uso desproporcionado de la fuerza pública, detenciones arbitrarias y control de la información" .