Diversas entidades ambientalistas expresaron su preocupación por la autorización del proyecto minero en suelo mendocino.
Al respecto indicaron que "Potasio Río Colorado (PRC) implicaría una rápida extracción de recursos de potasio no renovables, y una significativa contribución al agotamiento del gas argentino". También apuntaron que "aún en su versión mejorada (de relocalización), el depósito de sal (de 120 millones de toneladas) que quedará en la superficie constituiría un enorme pasivo de riesgo, virtualmente a perpetuidad".
Por otro lado, de concretarse el proyecto requerirá 1 millón de metros cúbicos de gas por día, tanto como el consumo residencial + comercial + oficial de toda la provincia de Mendoza, o un tercio de las importaciones desde Bolivia. Si al gas sumamos la electricidad requerida, el consumo energético total de PRC equivale al 83% de Atucha I. PRC emplearía a 386 personas en Mendoza, pero con la misma cantidad de energía requerida, la industria mendocina hoy da trabajo a 16.100 obreros, dicen los ambientalistas.
Por último, sostienen que se han ensalzado los 40 millones de dólares anuales que este proyecto dejaría al fisco mendocino. Pero ese monto representaría menos de 4% de los 1.000 millones de dólares que facturaría la mina.