CENTENARIO (ACE).- El oficialismo no logró los votos que necesitaba para aprobar el coqueto loteo en las inmediaciones del puente Centenario - Cinco Saltos; y la frustrada aprobación derivó en el quiebre de la Concertación en el Deliberante.
Ayer duró más de tres horas la sesión especial donde se ponía en juego el loteo de siete hectáreas de la zona rural con destino a un complejo habitacional en las cercanías del balneario.
La inversión -que tendría como efecto secundario posibilitar el acceso a las cloacas al barrio de Villa Obrera- naufragó luego de un año de permanecer en debate en el Concejo porque el oficialismo perdió la mayoría especial que necesitaba para autorizar una excepción al planeamiento ambiental.
La votación salió cinco votos a favor y tres en contra; y con esos números la iniciativa privada fue enviada a archivo.
El voto que resultó esquivo, salió del seno del bloque oficialista: lo emitió el concejal del Frente Democrático por Centenario, Mario Acuña.
"No hay oportunidades de manifestar dónde está parado cada uno; y con esta decisión el edil Acuña tomó distancia de una decisión política que se constituye en toda una referencia de a qué modelo político apunta cada uno", dijo ayer el presidente del Concejo, Oscar Nahuel, decepcionado por el resultado de la votación.
Para Nahuel esto marcó la intención política de Acuña de irse del bloque. "No hay motivos para no aprobarlo, a partir de esta iniciativa estábamos frente a la oportunidad de llevar más servicios a una zona postergada, y ahora esta posibilidad se escapa", dijo.
Para Acuña el voto en contra no fue motivo de quiebre. "Espero que no -dijo-, es un voto a conciencia, no creo que sea motivo de ruptura", dijo a pesar de que conocía que el rechazo lo iba a poner en el ojo de la tormenta dentro del oficialismo, que exigió cohesión.
El edil argumentó que la urbanización se preveía en una zona inundable ante una crecida extraordinaria; y dijo que mientras no se realicen las obras de contención, no convalidaría la construcción de un barrio en el área costera.
Sus argumentos fueron diferentes a los de defensa del área productiva que llevaban los productores. Los representantes del sector aplaudieron la decisión porque hasta hace pocos días se presentaban ante los concejales a sabiendas que el oficialismo tenía la firme postura de autorizar el barrio privado.
