El Senado aprobó por 38 votos contra 30 la prórroga por un año de las facultades delegadas, que otorgan al Ejecutivo la potestad de fijar las retenciones agrarias, entre otras atribuciones. Luego votó favorablemente los "superpoderes" que permiten al gobierno reasignar partidas presupuestarias, aunque con un límite del 5% del presupuesto.

El proyecto fue convertido en ley gracias a los votos del oficialismo, el ARI de Tierra del Fuego y el de Horacio Lores del Movimiento Popular Neuquino. Los 30 senadores que se opusieron fueron del radicalismo, el peronismo disidente, el socialismo, la Coalición Cívica y algunos vecinalistas. En esta lista se ubican los votos de los rionegrinos Pablo Verani y María José Bongiorno, que se fue hace poco del bloque oficialista. A poco de la votación, un grupo de ruralistas ocasionó disturbios frente al Congreso y hubo un herido.

De esta manera, cerca de 1.900 leyes continuarán en manos del ejecutivo por 240 días, con una única prórroga de 30 días más. El texto fue aprobado tal como había salido de Diputados, por lo que los "superpoderes" sólo estarán en manos del "titular del Poder Ejecutivo nacional (Cristina Fernández de Kirchner) y el jefe de Gabinete de Ministros (Alberto Fernández)". Entre las facultades delegadas se encuentra el artículo del Código Aduanero, que le permite a la Casa Rosada imponer retenciones a las exportaciones de granos.

Los ruralistas, encabezados por el titular de la Federación Agraria entrerriana, Alfredo De Angeli , se manifestaron en la puerta del parlamento, amenazaron con cortar la avenida Entre Ríos y voltearon las vallas frente al Congreso. La guardia de infantería retuvo a los manifestantes al edificio y hubo un herido leve, que sufrió un golpe en la cabeza.

Durante ocho horas de debate, el kirchnerismo se abroqueló en la defensa de la iniciativa, que fija además la creación de una comisión bicameral, de 8 miembros por cada cámara, para que en un plazo de 240 días analice y revise cuáles de las 1900 normas dictadas hasta el año 1994 mantienen su vigencia.

El jefe del bloque oficialista, Miguel Pichetto, advirtió que "la oposición tiene un gran desafío que es no actuar con demagogia ni con irresponsabilidad, porque esto conduce a la falta de gobernabilidad política". En su vehemente alocución, dijo que "hay gente que desea que el gobierno se vaya antes del 2011", pero "este es un gobierno que tiene la plenitud de sus facultades políticas y las va a ejercer".

Previamente, el radical Sanz sostuvo que "es un contrasentido que en esta misma reunión de la Cámara se haya aprobado un proyecto que reduce las retenciones agropecuarias de una docena de partidos de la provincia de Buenos Aires y al mismo tiempo se sanciona una ley que prorroga por un año que esa facultad, que es del Congreso, la siga usando el Ejecutivo nacional".

Sanz dijo además que "11 millones de argentino, sobre 15 millones del padrón electoral, votaron en contra del modelo que fue propuesto como un plebiscito por parte del gobierno" y que un número similar de personas "también lo hizo en contra de la delegación de facultades y los superpoderes". El santafesino Carlos Reutemann confirmó su voto en contra. Dijo que "es un despropósito que el Congreso resigne una vez más fijar políticas de fondo y de largo plazo en un tema crucial como es la política agropecuaria. Su par Roxana Latorre, votó con el oficialismo. (DyN/R.Central)