La sorpresiva llegada del veterano Matías Almeyda a River disparó la decisión del volante central Nicolás Domingo de preparar el terreno para irse del club de Núñez al sentirse "relegado" y recalar en otro club. "Si tengo una posibilidad de irme a otro lado lo voy a hacer. Para mí felicidad, para mí cabeza; si no, no voy a estar bien", sostuvo.

Más allá del arribo de Almeyda, el miércoles Gorosito dio una clara demostración de que no tendrá en cuenta Domingo bajo ninguna circunstancia. Es que para el juego con Lanús (1-2), el DT sólo contaba con él para el puesto de volante central, sin embargo eligió a Mateo Musacchio, un zaguero. "A uno por ahí le genera realmente un vacío porque tenía muchas ilusiones. Primero Oscar (Ahumada) se podía haber ido en una transferencia. Ahora Oscar por desgracia se tiene que operar y uno se ilusionaba con el partido de anoche (miércoles) para poder mostrarse", dijo Domingo, a modo de lamento. Gorosito, explicó Domingo, "ha optado por otro jugador que no juega en esa posición (por Musacchio). Lo habrá visto mejor que a mí".