"No sé dónde puedo detenerme, sólo intento correr lo más rápido posible, aunque me sentía un poco cansado. Me limito a disfrutar. Es realmente un momento muy especial para mí", señaló el extrovertido Usain Bolt después de transformarse otra vez en la gran figura del Mundial de Atletismo y conseguir el doblete de velocidad tras ganar los 200 metros, clavando un nuevo récord del mundo (19.19) y superando los 19.30 que impuso hace un año en los Juegos Olímpicos de Beijing.
El jamaiquino lucha contra sí mismo. Ayer venció nuevamente por gran ventaja, y de nada sirvió el esfuerzo de quienes completaron el podio: el panameño Alonso Edward (19.81) y el estadounidense Wallace Spearmon (19.85).
Sin Tyson Gay a la vista (el defensor del título se bajó por un problema en los aductores), al máximo héroe del Mundial le quedó el oro de los 200 metros en bandeja. Esto después de establecer el domingo un prodigioso récord del mundo al correr los 100 metros en 9 segundos y 58 centésimas, mejorando también su triunfo en el hectómetro de Beijin (9.69). Como lo hizo en los Juegos, ahora el caribeño irá por el primer lugar en relevo 4x100 metros, cuya primera ronda comenzará hoy.
Jamaica sumó otro oro ayer gracias a la enorme actuación de la campeona olímpica Melanie Walker, al alzarse con los 400 metros vallas en 52 segundos y 42 centésimas, a ocho centésimas del récord del mundo (52.34) establecido por la rusa Yuliya Pechonkina en 2003. La que intentará cortar con la hegemonía de los atletas nacidos en la cuna del reggae será la norteamericana Allyson Felix, que tiene entre ceja y ceja el oro en la final de los 200 metros que se disputará hoy. Los jamaiquinos terminaron 5-0 ante los americanos en las pruebas de velocidad de Beijing y ahora están 3-0. Impresionante.
Estados Unidos sí festejó en el decatlón con el triunfo de Trey Hardee, quien sumó 8.790 puntos y aventajó al cubano Leonel Suárez (8.640) y al ruso Aleksandr Pogorelo (8.528).