La historia entre Huracán y Matías Defederico no terminará bien. Tal como prometió, el delantero faltó a la práctica de ayer como respuesta a la negativa de la dirigencia del Globo de transferirlo al Corinthians.
La situación, tal como está, continuará en la justicia, ya que las compras y ventas en el club que preside Carlos Babington deben ser autorizadas por el juez que entiende en el concurso de acreedores de la institución.
"Si se va a Brasil será para quedarse en la playa", sentenció el titular del club, quien reiteró que la oferta de 4 millones de dólares realizada por el Corinthians es insuficiente y aseveró que "está mal asesorado. Lo necesitamos y le prometimos a Cappa que iba a estar. No puede irse a Corinthians sin autorización. Parece que tiene poca memoria. Hace 6 meses no jugaba y Cappa lo puso donde está".
Defederico no se calló: "La mayoría de los jugadores se fueron mal. Nadie se fija lo que yo sufrí. Me boludearon. Nunca me sentí valorado como debe ser un jugador de mi categoría y surgido del club. Siempre dicen muchas palabras, pero las tenés que agarrar con pinzas porque te ilusionas y te podes quedar sin nada. Hay más lío de lo que debería haber. Yo sé que la semana que viene voy a estar jugando en Brasil, pero quería irme sabiendo que podía volver algún día a Huracán. Ellos (por los dirigentes) me quisieron ensuciar y ahora la mayoría de la gente de Huracán me odia. Son muy pocos los que se quedan por amor a la camiseta" , acusó el futbolista.
La buena para el entrenador fue que se aseguró el regreso del volante Leandro Díaz y la incorporación de Pablo Jerez.
