| La secretaria general del gobierno, Dilma Rousseff, principal aspirante oficialista a la presidencia, fue el centro de un acalorado debate ayer en el Senado brasileño cuando una ex directora tributaria la acusó de presionar indebidamente para favorecer a un aliado político del gobierno. La ex funcionaria Lina Vieira dijo a la Comisión de Constitución y Justicia del Senado que la ministra Rousseff la convocó a la casa presidencial para pedirle "agilizar" una investigación de supuestas irregularidades tributarias de un hijo de José Sarney, presidente del Senado y aliado de Lula da Silva. Vieira dijo que interpretó la petición de Rousseff como un llamado a archivar las investigaciones sobre la familia de Sarney, ordenadas por un tribunal de Justicia. Desde que su nombre surgió el año pasado como favorita de Lula para sucederlo en la presidencia, Rousseff enfrentó presiones de la oposición por supuestamente elaborar un informe de gastos sigilosos del ex presidente opositor Fernando Henrique Cardoso y por influir en la venta de la aerolínea Varig. | |