ZAPALA (AZ y AN).- En una audaz maniobra, un grupo de delincuentes ingresó ayer a la casa del ex camarista Víctor Hugo Martínez y se llevó una caja de seguridad que contendría una fuerte suma de dinero, cheques, documentación y armas de grueso calibre.
Los malvivientes forzaron una ventana y maniataron a la empleada doméstica aprovechando que el dueño de casa no se encontraba en el lugar.
Hasta anoche no había datos sobre los autores del hecho a pesar de que se montó un impresionante operativo de control policial sobre las rutas de la zona.
La diputada Soledad Martínez, hija del ex juez, dijo anoche a "Río Negro" que "los autores conocían el movimiento de la casa, pero no me da la impresión que esto tenga otra connotación" más que la de un robo común.
Lo dijo al ser consultada sobre si los ladrones dejaron algún mensaje en referencia a su actividad o a la de su padre, que fue durante muchos años integrante de la Cámara en lo Penal de esta ciudad.
De acuerdo con los datos oficiales, los ladrones serían dos o tres. Ingresaron en un auto por el frente de la casa ubicada sobre la calle Picunches alrededor de las 13 de ayer. Casi en forma instantánea forzaron una ventana y se metieron en la casa de dos plantas.
La empleada escuchó ruidos pero no alcanzó a avisar ya que la amenazaron con armas de fuego y la amordazaron para que no gritara.
Los sujetos se dirigieron directamente a una dependencia interna de la casa donde Martínez guardaba la caja fuerte que no se encontraba amurada a la pared (ver aparte).
La cargaron en el baúl del automóvil y se dieron a la fuga sin que ninguno de los vecinos notara nada raro.
Unos minutos después alguien llegó a la casa y al notar la ventana rota decidió llamar a la policía.
"La empleada aportó algunos datos relacionados con los delincuentes que nos permitirán avanzar en la investigación", aseguró ayer una de las fuentes judiciales consultadas por "Río Negro".
Las huellas que dejó el vehículo que ingresó a la parte delantera de la casa aportaron otros elementos para los pesquisas que anoche trabajaban intensamente en la búsqueda de los autores.
La policía montó un importante operativo cerrojo en las rutas cercanas con fuerte presencia de efectivos armados que controlaban el tránsito desde y hacia esta localidad.
Poco después del hecho, policías recorrieron la zona cercana a la terminal de ómnibus y hasta ingresaron en varios comercios identificando personas sospechosas. Al cierre de esta edición no había rastros del automóvil utilizado por los asaltantes.