El fútbol volvió una noche, para entregar una ráfaga de emociones en el arranque y algo de pierna fuerte en el cierre. Tigre logró un merecido 2-1 sobre San Lorenzo en el arranque de la Copa Sudamericana y aunque dejó pasar una gran chance de liquidar la historia, logró lo más importante: ganar.
Para los de Diego Simeone, un gol salvador que le puede dar la chance de pasar de ronda con el 1-0 en el Nuevo Gasómetro.
El Matador tuvo 4 minutos "furiosos" y fue muy efectivo. Primero con una aparición de Martín Morel, para sacar provecho de un error defensivo, y después con una gran jugada colectiva definida por Lucas Oviedo.
Así, desde los vestuarios, el local se puso 2-0 y alteró todos los planes, especialmente para los del "Cholo".
El desconcierto Santo duró por un instante, pero a los 15 llegó un aviso de Gonzalo Bergessio. A partir de ahí, un interesante palo por palo, con escaso nivel, pero mucho vértigo.
El debutante Pablo Migliore se lució ante un remate de Matías Giménez que tranquilamente le pudo dar paso a la "historia liquidada", pero cinco más tarde, descontó San Lorenzo y se metió en partido. Diego Rivero, con un "fierrazo", batió a Daniel Islas y logró un gol clave para mantener la ilusión.
Todo lo bueno que hicieron en el primer tiempo se lo olvidaron en el complemento. Lo mejor fue en el inicio, cuando Migliore tuvo otra gran atajada, esta vez ante el "Chino" Carlos Luna.
A partir de los 25, el Santo se jugó las últimas fichas y pudo empatarlo con una mano a mano de Juan Carlos Menseguez, pero Islas respondió como su colega.
En el cierre, pierna fuerte y varias patadas de más. La peor de todas fue de Juan Manuel Torres a José San Román. Iban 35 y el Chaco se llevó a los vestuarios las últimas chances de igualar una historia que fue esquiva desde el comienzo. En los segundos 90 minutos habrá pase para uno, freno para otro. (AN)