El gobernador bonaerense, Daniel Scioli, les pidió ayer a los obispos de la provincia de Buenos Aires "un profundo apoyo" para "trabajar juntos en la solución de la pobreza".

A su vez, el mandatario solicitó a los prelados colaboración para luchar contra la problemática de la droga, y consideró "imprescindible" el esfuerzo conjunto para enfrentar la "exclusión social". Scioli destacó la labor que realiza Cáritas en distintos puntos del país, y aseguró que "la justicia social es un compromiso de todos y todo mi gabinete está abocado a trabajar por la inclusión". El gobernador se reunió con dieciséis obispos de la provincia de Buenos Aires, acompañado por el jefe de Gabinete, Alberto Pérez, y sus ministros Eduardo Camaño (Gobierno) y Baldomero Álvarez de Olivera (Desarrollo Social). Al Salón Francés de la Casa de Gobierno los obispos concurrieron encabezados por el arzobispo de La Plata, monseñor Aguer.