CORDERO (ACE).- Los municipios de Cordero y Campo Grande decidieron retirarse del ente de desarrollo del lago Pellegrini (Endecic) y la institución debería disolverse, según figura en los estatutos de creación.

Los municipios díscolos le pedirán a la provincia que se realice una delimitación de ejidos -en una zona hoy de más de 400 hectáreas que es de uso compartido para el desarrollo del Pellegrini- para poder tomar posesión de las tierras fiscales que están dentro de los límites de cada comuna.

En la ley de creación del Endecic está estipulado que si alguno de los municipios integrantes se retira, el ente debe ser disuelto, se recordó.

El punto de la discordia fue las presuntas maniobras palaciegas por parte de los representantes de Cinco Saltos -tanto del Concejo, como los de la Cámara de Comercio- en el directorio, aseguraron los que se fueron.

Los desencuentros tienen al menos dos años, pero terminaron de eclosionar a partir de que el jefe comunal de Cordero, Fabián Galli, comenzó a exigir que se reubiquen los hornos de ladrillos que se asentaron a la vera de la ruta en el camino al lago, que se regularizara la situación comercial, y que se pusiera coto a la explotación de las canteras.

Cordero emitió una ordenanza el lunes por medio de la cual retiró a sus directivos. En cuanto a Campo Grande, el presidente del Concejo, Ariel Rivero, dijo que la decisión política estaba tomada en el mismo sentido.

"Hace tres años que no funcionan, se quieren hacer cosas y no se hacen. Galli planteó varias cosas y no se llevan a cabo porque los directores que nombran los municipios en el ente no respaldan las políticas que se plantean desde su propio municipio: se necesita gente idónea, que sepa, que ejecute lo que se decide", dijo Rivero.

Tanto Rivero como Galli dijeron que el actual presidente del ente Carlos Rodríguez, renunció dos veces al cargo, y luego fue impuesto por presiones sectoriales vinculadas más a los personalismos de los representantes de Cinco Saltos, que a las políticas de Estado.

"Cordero levantó la participación de sus dos directores porque las reuniones resultan estériles, Cinco Saltos traslada al ente los problemas políticos que hay en su municipio que impiden la operatividad de la administración. En diciembre del 2008 se habían comprometido a reordenar a los ocupantes y ni siquiera se le permitió a Cordero trabajar en este aspecto", dijo Galli.