NEUQUÉN (AN).- La banda The Jackpots regresa al ruedo con un recital de jump blues renovado y diferente. Habrá músicos invitados, temas propios nuevos y una innovadora sesión de vientos, al mejor estilo de un grupo que ya es un clásico de la noche neuquina.
La banda se presentará hoy, a las 23, en La Conrado Centro Cultural, ubicado en Irigoyen 138. Las entradas anticipadas se pueden adquirir, con descuento a quince pesos, en Librería El Amante de avenida Argentina 245, o minutos antes del show en la taquilla de la sala.
The Jackpots es una banda de extensa trayectoria en el ámbito de jazz y el blues local. Su perfil se mantiene siempre dentro de lo que se define como jump blues, una inquietante mezcla de jazz, swing y blues.
El grupo está integrado por Rafo Grin en guitarra, Damián Duflós en armónica y voz, Charly Aros en bajo, y J.J. Sobarzo en Batería. Para este espectáculo los "Jackpots" estarán acompañados por Alfredo López en guitarra, Fabio Balbarrey en saxos, Amadeo Bonaiutto en trompeta y Wilson Maza en piano.
"Esta vez venimos con un show nuevo, porque por primera vez incorporamos una sesión de vientos, se incorporarán a la banda saxos y trompeta que le dan otra sonoridad a los temas. Los temas son la mayoría de nuestra autoría, la gente se encontrará con algo diferente e interesante", comentó Rafo Grin.
Los integrantes de The Jackpots incursionaron en otras bandas y se conjugaron con otros músicos. La experiencia obviamente fue para ellos enriquecedora e inolvidable; sin embargo dicen "sentirse más libres en su propia banda y con el jump blues. Y la razón es simplemente una: con The Jackpots se dan el gusto de explotar al máximo las posibilidades rítmicas y estéticas que brinda el jump blues.
En la década del 30, el sonido del jazz se fue mezclando con melodías del blues clásico, con letras humorísticas y ritmos heredados del boogie woogie. Los precursores como Louis Jordan comenzaron a grabar composiciones que mezclaban desde el blues más clásico hasta baladas y piezas pop. La guitarra fue desplazada de su lugar de privilegio, dándole preponderancia al piano y a los saxos. Así fue gestándose, definiéndose y creciendo el jump blues o también llamado blues de la Costa Oeste, un estilo más bailable que el blues, más profundo que el swing y más intenso que el jazz.
El género se hizo popular en los años 40 y muchos especialistas lo definen como un género precursor del rock and roll.