ROCA (AR) .- Con la instalación de antenas de telefonía móvil en Roca, hace más de ocho años, se abrió la polémica por las radiaciones y sus posibles consecuencias negativas para la salud. Hoy un vecino asegura que los efectos nocivos están científicamente comprobados y propone trasladarlas a la zona de las bardas. En tanto, desde el municipio sostienen que son datos muy difíciles de comprobar.

Ángel Sturman es uno de los que sostiene hace tiempo que "está científicamente comprobado que esas ondas son adversas para la salud. Hace tres años y medio que vivo en un céntrico edificio que en la terraza tiene una antena, y a partir de ahí empecé a tener problemas de salud y me diagnosticaron cáncer, a mi hermana también y a mi esposa hipertensión", relata Sturman. Si bien los análisis médicos que se ha realizado no confirman la incidencia de la antena en su enfermedad, él insiste en que la ubicación de la misma es un factor muy influyente.

Al respecto, la responsable del área, Laura Juárez, explica que en 2006 se realizaron consultas tanto a la Comisión Nacional de Comunicaciones como al Ministerio de Salud de Nación y en ninguno de los casos se pudo comprobar que las antenas fueran contaminantes.

Cansado de la falta de respuestas y acciones Sturman hizo llegar solicitudes tanto al Concejo Deliberante local como a la Legislatura provincial para debatir el tema.