CENTENARIO (ACE).- Centenario quedó conmocionada ayer cuando se conocieron los detalles del hurto que se descubrió a primera hora en la municipalidad.

Lo que primero sorprendió fue la modalidad: con la llave y la clave, los ladrones se llevaron unos 36.000 pesos de la caja fuerte del área de recaudaciones.

Lo segundo fue que al estilo de las películas, dejaron una nota amenazante confeccionada con letras recortadas de diarios y revistas. La destinataria es una funcionaria del área (ver aparte).

La municipalidad pidió que la nota sea peritada en Gendarmería para buscar huellas dactilares. En la caja fuerte no se habrían hallado, dijo a "Río Negro" el intendente Javier Bertoldi (PJ).

Para el jefe comunal, la nota dejó en claro de que el hurto de ayer fue planificado con anterioridad al robo que se produjo el 7 de julio pasado, cuando a una empleada le arrebataron 32.000 pesos de la recaudación que llevaba en la cartera para depositar en el banco.

La mujer iba sola y a pie a la sucursal Centenario del BPN, ubicado al otro lado de la plaza, prácticamente a una cuadra del edificio comunal.

En cuanto al hurto de ayer, Bertoldi aseguró que el ladrón tenía la llave y la clave de la caja fuerte ya que no se violentó el sistema. Informó a "Río Negro" que el botín consistió en 34.600 pesos en efectivo y dos cheques que en total sumaban unos 2.000 pesos.

Agregó que la llave y la combinación de la caja sólo la tenían tres personas: el secretario de Hacienda, Jorge Vidal; la directora de recaudaciones Miriam Gómez y otro empleado. La clave fue modificada cuando asumió el nuevo gobierno (de la Concertación) que sucedió a décadas de administración emepenista.

La primera versión policial dio cuenta de que la caja había sido sustraída y que los delincuentes habían violentado un sector para ingresar al lugar.

Bertoldi aseguró que no violentaron el acceso, y que el robo se hizo "llave en mano". "No sabemos cómo entraron: si se quedaron adentro, o entraron por el paredón del vecino (en un patio interno que hay en esa manzana) e ingresaron por la ventana de la oficina de la dirección de recaudaciones" para llegar a la caja.

Anoche la policía confirmó que no hubo violencia para cometer la sustracción, por lo que el caso quedó caratulado como "hurto".

Por la ubicación de las oficinas, "difícil se hubiera dado cuenta el sereno" del accionar de los ladrones, evaluó Bertoldi.

"Fue la misma maniobra. Cuando robaron en la calle, ya estaba planificado esto, pero vieron la posibilidad de llevarse más dinero" y por eso antes de dar el golpe en el municipio llevaron a cabo el arrebato en la calle, conjeturó. Basó sus especulaciones en el tenor de la nota que dejaron los delincuentes.