| Oro, carbono, hierro, cobalto, plata, zinc. Los elementos son conocidos; lo importante es la forma: nanotubos, nanoesferas. Diferentes esrcucturas que implican diferentes comportamientos y propiedades. Mundialmente, la Organización Internacional de Estándares (generadora de las normas ISO, las siglas en inglés) está elaborando diez normativas diferentes sobre nanotecnología, explicó el licenciado Juan Ignacio Galimberti, del Instituto Argentino de Racionalización de Materiales (IRAM). Ninguna de ellas está concluida, con lo que hoy por hoy no existe una normativa internacional sobre cómo hacer nanotecnología segura, salvo un "reporte técnico" -de categoría sustancialmente menor a la de una norma ISO, aclaró el experto del IRAM- que debería ser revisado cada tres años. Según estudios internacionales citados por la doctora Hallberg, las características y los efectos de la mayoría de estos nuevos materiales en desarrollo sobre la salud humana se desconocen. Y si bien destacó que existiría el riesgo de que ocurra lo mismo con la nanotecnología que con los cultivos transgénicos, es decir, la reacción de una sociedad que percibe que el desarrollo industrial se hizo sin prever las consecuencias y a expensas del desarrollo humano y la salud pública. "Eso sucedió por un mal manejo de los científicos y tecnólogos -remarcó Hallberg-. Hay que dar a conocer todos los posibles efectos adversos y los no tanto." | |