BUENOS AIRES (ABA).- Ante la posibilidad cierta de que el oficilismo consiga mayoría suficiente como para impedir que se puedan reducir las retenciones, la Mesa de Enlace Agropecuaria intentará hoy "meter presión" sobre los legisladores no encuadrados en el kirchnerismo. "Mañana (por hoy) vamos a estar en la Comisión de Agricultura de la Cámara de Diputados, yo no daría por cerrada la cuestión", confió a "Río Negro" el vicepresidente de Confederaciones Rurales, Néstor Roulet.

Añadió que de no prosperar la movida en Diputados, en el Senado las cosas no van a ser nada fáciles para el oficialismo dados los "pases" que se están produciendo desde sus filas a sectores disidentes tras las elecciones del pasado 28 de junio.

Una fuente del macrismo reconoció que en la Cámara baja que si el bloque Sociedad e Igualdad que conduce Eduardo Macaluse, -más otros legisladores críticos de centro de izquierda- apoyan el sostenimiento de las actual manejo de las retenciones, es casi un hecho que el gobierno conseguirá el número para frustrar los reclamos del campo. También Miguel Bonasso, Vilma Ibarra y Ariel Basteiro aportarán a favor del oficialismo.

En el caso de la Concertación que integra el neuquino Hugo Prieto, si bien reclamaron como moneda de cambio que se apruebe el impuesto a la herencia y a la renta financiera es impensable que a la hora de votar acompañen la postura de los productores rurales. Así, el bloque del Frente para la Victoria conducido por Agustín Rossi conseguiría los 129 votos necesarios para el quórum y luego para ganar la votación.

"Veremos que pasa, nos vamos a mover en el Congreso para insistir en la necesidad de que se hagan las cosas bien, tenemos reservas sobre el resultado de la sesión del miércoles. No puede ocurrir que se ignore lo ocurrido en las última elecciones", concluyó Roulet.

De todos modos, Macaluse adelantó su rechazo a prorrogar el resto de las facultades delegadas, y que las concedidas se acoten a un margen de entre cuatro y ocho meses.

En la cuestión retenciones la postura que defiende el sector llamado "progresista" es que la facultad de aplicar las retenciones debe seguir en manos del Poder Ejecutivo, en contra de quienes dicen que es una facultad del Congreso por tratarse de un impuesto. Pero en el fondo, la oposición pone todas las fichas en el recambio de legisladores que se producirá el 10 de diciembre. Entonces la relación de fuerzas se moverá a su favor.

Avizorando ese panorama el oficialismo negociaría aceptando bajar a cero los derechos a la exportación del trigo y el maíz, aunque sin acceder a reducir el de la soja a un máximo del 25 % como promueven el PRO y La UCR. En cambio si se podría conciliar en ponerle un techo a las retenciones de manera que nunca pueda superar el monto del 33 %, más allá del cual los jueces consideran que es confiscatorio.