Lunes 10 de Agosto de 2009 Edicion impresa pag. 26 > Policiales y Judiciales
Abogado de Runge salió al cruce de las acusaciones
Puso énfasis en desvincular de la causa a la esposa e hijo.

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El defensor de los tres integrantes de la familia involucrada en una red de pedofilia y pornografía infantil, Omar Costa, consideró que el magistrado que investiga la causa "no tiene libertad para decidir" como consecuencia de la presión que ejerce la sociedad.

En diálogo con la radio "Seis" local, el letrado reconoció que no conocía el contenido del material secuestrado a sus defendidos.

Sin embargo anticipó que el intercambio de imágenes pedofílicas puede ser "moralmente reprochable, pero no constituye delito", según la jurisprudencia que citó.

Expuso asimismo que de, acuerdo a su conocimiento, no existían en cabeza de sus representados la presunta producción o comercialización de imágenes pedofílicas, ni tampoco publicación en un portal específico.

Criticó a los medios de prensa por la cobertura dada a este caso que conmocionó a la comunidad barilochense.

En ese sentido, planteó que cuando todavía el juez Miguel Angel Gaimaro Pozzi no llamó a declarar a los sospechosos, ya suenan voces de condena. "La condena social ya está, ya están condenados", se lamentó Costa.

Aconsejó que "la gente tiene que acostumbrarse a confiar en los jueces. Si usted no confía en su juez, espere que dicte la sentencia y apélela".

"Sólo las puede juzgar Dios"

En otro pasaje de la entrevista radial, Costa recordó expresas garantías constitucionales sobre los actos privados de las personas, y subrayó que "hay casos que pueden ser moralmente repudiados, pero no son delitos, cosas que efectuadas en privado solamente las puede juzgar Dios".

El letrado asimiló el mail a la carta y le adjudicó absoluta privacidad. "Ya hay fallos que dicen que enviarse por correo imágenes pedofílicas no constituye delito. No es reprochable desde el punto de vista del Derecho", ilustró Costa.

Puso especial interés en deslindar de la causa a Alicia Domínguez y a su hijo Hilario, al dejar como único sospechoso a Ricardo Runge.

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