Lunes 10 de Agosto de 2009 Edicion impresa pag. 24 > Sociedad
Tragedia sobre el asfalto rural, cerca de Allen
Un joven acompañante murió cuando el auto chocó contra una columna.

ALLEN (AA).- Fue la primera tragedia sobre el flamante asfalto rural que facilitó el tránsito por las chacras. Ayer a primera hora de la mañana dos allenses colisionaron contra una columna de hormigón, situada en una zona por demás riesgosa. Un joven de 22 años perdió la vida.

El trágico hecho ocurrió cerca de las 6, a un kilómetro de la Escuela Nº 27, en sentido oeste, sobre la calle rural Nº 4. En ese momento un Fiat Uno (patente CEZ - 864) que era conducido por Jorge Diez (40) y que transitaba en sentido Roca - Allen, colisionó fuertemente contra una columna de hormigón situada a la vera del camino. Diez viajaba acompañado por Celso Gerardo Muñoz (22).

El impacto fue tan violento que el motor del Fiat Uno se desprendió de la carrocería y el casco del vehículo cruzó una acequia hasta quedar volcado contra el cerco de una chacra. Tras el choque, la columna del tendido eléctrico se quebró y cayó hacia un costado de la banquina, pese a que la base posee una importante estructura de hierros y cemento. El Fiat se despedazó casi por competo.

"El choque fue fuertísimo, yo sentí el ruido de una explosión y la caída de la columna", dijo a "Río Negro" un vecino del sector rural. "Era sabido, este lugar se convirtió en una ruta más. Por acá circulan todo tipo de vehículos a gran velocidad", agregó.

Como consecuencia de la colisión, el joven Celso Gerardo Muñoz sufrió lesiones gravísimas y falleció minutos después de arribar a bordo de una ambulancia al hospital Dr. Ernesto Accame de Allen.

En tanto, el conductor del Fiat Uno, Jorge Diez, revistió heridas de distinta consideración y también fue trasladado al nosocomio local. Según se pudo conocer, ayer se encontraba fuera de peligro aunque seguía en observación.

Desde la unidad Sexta de la Policía se informó que, de acuerdo al primer informe médico, los ocupantes del automóvil "presentaban una ingesta de bebidas alcohólicas avanzada".

Luego del terrible accidente un grupo de efectivos policiales tuvo que trabajar en el lugar para despejar el asfaltado rural, ya que las partes mecánicas del Fiat Uno se encontraban dispersas por todo el camino.

Más allá de lo que determine la investigación judicial sobre las causas del accidente, el lamentable hecho pasó a ser la crónica de una muerte anunciada. Desde hace ya algunos meses, y ante los reiterados accidentes de tránsito ocurridos sobre la calle rural Nº 4, "Río Negro" expuso en varias oportunidades la peligrosidad del sector.

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