De todo tipo de análisis escuché y leí aquí en Río Negro. Los que se atribuyen el triunfo del justicialismo son varios. Intendentes, legisladores, compañeros militantes, traiciones en el gobierno, etc., etc. Todos dieron y dirán su opinión. Yo no seré la excepción.

Creo que el conjunto de la ciudadanía de Río Negro, en su mayoría, eligió el camino de terminar con este gobierno, que no elabora soluciones y no sabe cómo darle un rumbo cierto a la provincia. El Frente para la Victoria en Río Negro tuvo buenos candidatos, de mucho prestigio. Postulantes que se sintieron apoyados por la militancia, los representantes nacionales y por los intendentes del justicialismo. Estos últimos, de gran importancia por la labor que llevan en sus pueblos.

Obras de todo tipo llegaron a través de gestiones: viviendas, mejoramientos barriales, redes de agua, cloacas, asfalto, rutas, accesos, rotondas, escuelas, hospitales, cámaras de frío, subsidios a clubes de barrios y ONG, etc., etc., etc. Todo esto con fondos nacionales.

Viendo los resultados, me permito pensar en que el electorado rionegrino eligió votar a quien está más cerca del gobierno nacional para pueda seguir haciendo las obras que faltan en sus pueblos.

Ahora bien, revisando los archivos de noticias de los últimos tiempos respecto de esto, vemos que el gran gestor de todas las obras realizadas en la provincia es el senador Miguel Pichetto, quien con su presencia dio el respaldo necesario para garantizar la confianza del electorado.

Pienso entonces que el gran ganador de Río Negro es el propio pueblo, que supo mayoritariamente elegir a quienes pueden darles soluciones a sus requerimientos.

Carlos Montovio

DNI 14.501.754

El Bolsón