VIEDMA (AV).- Para Gladys Huinca de Huenteleo, la mamá de Pablo -el joven de 24 años asesinado en Valcheta el 8 de octubre de 2006-, ayer no se hizo justicia. La ansiedad con que esperaba que el Superior Tribunal de Justicia ratificara la condena al autor del asesinato de su hijo se desmoronó cuando el juez del STJ Víctor Sodero Nievas leyó la parte resolutiva del fallo.
"¿Y ahora qué, doctor?", preguntó tras la lectura con su voz apenas perceptible, dirigiéndose al abogado que la asiste, Mauricio Yearson. Eran las 13:30 de ayer cuando sus expectativas de ver detenido al policía condenado por el caso, volvieron a postergarse.
El sargento de la Policía rionegrina Rogelio Audilio Flores, ya juzgado por la muerte del muchacho, seguirá libre a pesar de haber sido considerado autor del delito de homicidio contra el joven de Valcheta, Pablo Huenteleo. El STJ decidió anular parcialmente la condena contra el efectivo policial, luego de modificar la calificación legal del caso.
Los jueces consideraron que Flores incurrió en "homicidio con exceso en legítima defensa" y no en "homicidio simple", como había fallado la Cámara que juzgó y condenó tiempo atrás al uniformado. Por eso, el STJ decidió enviar el expediente nuevamente al cuerpo que preside Pablo Estrabou, y que integran Francisco Cerdera y Jorge Bustamante.
Estos magistrados deberán rever la pena impuesta, que originalmente fue de 12 años, por una menor, aunque se estima que será de cumplimiento efectivo. Se presume que el fallo definitivo estará firme recién a fin de año.
Para los jueces del STJ, Luis Lutz, Sodero Nievas y Alberto Balladini, existió una necesidad inicial de defenderse por parte de Flores, que derivó en el disparo al tobillo del muchacho con que el que se había tomado a golpes.
Destacaron que hubo peligro para el efectivo, lo que queda de manifiesto con las lesiones recibidas (rasguños y una fractura de tabique). Sin embargo -opinaron los jueces- "la conducta defensiva, que comenzó siendo justificada, luego devino en ilícita por un exceso extensivo, ya que el segundo disparo se realizó cuando la agresión había cesado hacía unos instantes".
En la lectura del fallo estuvieron presentes el abogado querellante, Mauricio Yearson; la mamá de la víctima, Gladys Huinca; el abogado del imputado, Raúl Cámpora y la subsecretaria de Derechos Humanos de la provincia, Gladys Cofré, junto a personal de ese organismo que acompaña a la familia de Huenteleo desde el inicio de la causa.
Flores está acusado de haber ultimado a balazos al muchacho en la madrugada del 8 de octubre de 2006, frente a la casa de la víctima, luego de que ésta tuviera una discusión con su mujer en la vía pública y la policía intentara intervenir.
El policía continúa cumpliendo servicios en la fuerza. Actualmente tienen licencia por enfermedad de un familiar. Cobra la mitad de su sueldo, no porta arma ni uniforme y desarrolla tareas administrativas.
