El diputado nacional electo Néstor Kirchner afirmó en la localidad bonaerense de Quilmes, en el marco de un encuentro con intendentes de la tercera sección electoral, que "el diálogo político no significa que renunciamos a nuestros principios".

En su primera reaparición relevante, el ex presidente minimizó la derrota sufrida en la provincia de Buenos Aires el pasado 28 de junio al asegurar que el oficialismo obtuvo un "triunfo nacional".

"En la Provincia se perdió por algunos votos, pero a nivel nacional quedamos como primera minoría", agregó que "cuando vamos al diálogo, no vamos al renunciamiento de nuestras ideas".

Además, confirmó que "seguiremos siendo alternativa en el 2011" y dijo que "continuaremos teniendo la iniciativa política".

"Voy a asumir como diputado nacional y esa será una nueva experiencia en mi vida. Aprenderé con humildad y defenderé esta transformación y la convivencia. Existen sectores de poder que a veces presionan para obtener cosas. Pero la política debe ir resolviendo las cuestiones de este país", dijo.

Kirchner tiró el guante a la oposición y la desafió a "ayudar a gobernar". "La Argentina tiene tres minorías importante: el Partido Justicialista y sus aliados; la segunda es el radicalismo con la Coalición Cívica y la tercera es la derecha argentina", reseñó en un acto del PJ bonaerense.

Kirchner reunió al peronismo bonaerense con la meta de reconstruir su poder con vistas a 2011, pidió "no bajar los brazos, ni agachar la cabeza", reclamó "corregir errores sin ceder poder", en un encuentro en el que dominó la intención de reconstruir la transversalidad y aseguró que caminará el país "de una punta a la otra cada con más fuerza y convicción".

El ex presidente juntó al gobernador Daniel Scioli; a su vice, Alberto Balestrini; funcionarios, diputados nacionales y provinciales del distrito bonaerense; e intendentes y concejales de la tercera sección electoral, la única región donde el Frente Justicialista para la Victoria ganó el 28 de junio. Allí dio definiciones acerca de su sector al precisar que "el kirchnerismo nunca existió, no existen los ismos, es un espacio plural y nacional donde se puede hablar con muchos sectores argentinos". Ante un centenar de dirigentes, Kirchner aseguró que seguirá "caminando la Argentina de punta a punta" para dar una "pelea por las convicciones" luego de la derrota electoral y pidió "no andar con la cabeza baja, sino con la cabeza alta, porque pusimos todo nuestro esfuerzo para levantar al país". (DyN)