BUENOS AIRES (ABA) . - El tironeo político en el Congreso por el decreto presidencial que dio vía libre a los aumentos en las tarifas de gas incluyó ayer un fuerte lobby neuquino en apoyo a las subas, ya que consideran que así no se originarán despidos en la provincia.

En las discusiones en la Comisión de Energía se hizo presente el secretario general del sindicato del Petróleo y Gas Privado de Neuquén y Río Negro, Guillemo Pereyra quien advirtió sobre la posible paralización de la producción si no se autorizan los aumentos establecidos.

"Es probable que se produzcan desbordes que paralicen totalmente la producción del petróleo y gas", manfiestó Pereyra distribuyendo un escrito en esos términos.

Pereyra alertó sobre el peligro de que se paralicen en su provincia inversiones en el área con lo que ello originaría en materia de desempleo.

En ese ámbito el secretario de Energía de la Nación, Daniel Cameron, hizo una férrea defensa del decreto asegurando que un 95 % de los consumidores puede pagar el cargo fijo (destinado a las redes de gas) y que solo había incorrecciones en algunas boletas.

Un rol protagónico en el debate tuvo el senador nacional del Movimiento Popular Neuquino, Horacio Lores quien subrayó que "no se puede seguir subsidiando el consumo, sino como alternativa, establecer una diferenciación colocando medidores".

Lores también aludió en la Comisión a como la crisis del gas impacta en general en toda la actividad de la provincia. Recordó su solidaridad con el campo y comparó ambas situaciones. "Mientras los productores ahora tienen el 30% de las retenciones, nosotros tenemos el 100%", le dijo al portal NCN.

La senadora kirchnerista Nanci Parrilli (FpV-Neuquén) acompañó la postura de Lores destacando que "lo importante es mantener las fuentes de trabajo; el aumento no afecta a toda la gente ya que el promedio de la factura ronda entre los 50 y 60 pesos".