CARACAS (AFP).- El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, repudió ayer las agresiones a una emisora y anunció la detención de Lina Ron, militante radical y presunta autora del ataque con bombas lacrimógenas contra la sede de la televisora Globovisión, perpetrado el lunes.
"Hoy (martes) ella (Ron) se presentó. Bien hecho que se haya presentado y está detenida, no hay más alternativa, violó la ley y debe recibir el peso de la ley", expresó Chávez, luego que la Fiscalía venezolana dictara una orden de arresto en contra de Ron después de haber visto los videos grabados durante la agresión.
El mandatario condenó la acción de Ron, quien es una dirigente de movimientos sociales (similares a los piqueteros argentinos) y una estrecha aliada del gobierno, y afirmó que el ataque con bombas lacrimógenas que sufrió Globovisión es un acto "contrarrevolucionario, anárquico, que atenta contra la paz del país´´.
"Cuando se trata de la ley no puedo meter la mano por nadie, ni por nada, porque eso fue una violación de la ley y un acto inaceptable", sostuvo Chávez.
"Ese acto de agresión contra una planta de televisión contrarrevolucionaria lo que hace es darle oxígeno a la contrarrevolución, y es un acto contrarrevolucionario que nosotros no podemos permitir ni como revolución, ni como gobierno, ni como Estado", fustigó.
Unas 30 personas armadas atacaron el lunes con bombas lacrimógenas la sede en Caracas de Globovisión, televisión muy crítica con el gobierno de Chávez. Un agente de la Policía metropolitana y un guardia de seguridad privada resultaron heridos en la agresión.
En tanto, en medio de las críticas internacionales por la situación de la prensa en el país, la Comisión de medios de la Asamblea Nacional (Parlamento) venezolana negó que exista oficialmente un proyecto de ley de delitos mediáticos y admitió que la polémica propuesta realizada la semana pasada provocó "divergencias" y no será por ahora discutido en la plenaria. "No existe en el seno de esta Asamblea nacional un proyecto de ley de delitos mediáticos ", declaró el diputado Manuel Villalba, de la Comisión de medios de la Asamblea Nacional. La propuesta de ley especial sobre delitos mediáticos, presentada por la Fiscal general venezolana Luisa Ortega propone que se "ponga límites" a la libertad de expresión con una normativa cuyo incumplimiento acarrearía penas de cárcel.
