Rondan los 30, no tienen pareja estable, por lo general viven solos y dan gran importancia a disfrutar de los tiempos de ocio. Además, tienen sueldos por sobre el promedio, viajan fuera de temporada para aprovechar las ofertas y poseen gran manejo de internet y de las redes sociales. Estos rasgos definen, a grosso modo, el perfil del viajero que se lanza a un periplo en solitario.
Un segmento del mercado turístico que indiscutiblemente ha crecido más que el resto de la industria. Porque si bien es difícil dar con cifras y estudios que grafiquen la magnitud de este nicho, tanto en agencias de viaje nacionales como en el propio Sernatur reconocen que, cada vez más, los viajeros se están lanzando a recorrer sin más compañía que el propio equipaje.
DESTINOS SOLITARIOS
Según Sernatur, cerca de el 12% de los desplazamientos que realizan los turistas nacionales se realizan de manera solitaria. Y de los que llegan del extranjero, un 50% lo hace de esa misma manera. Aunque estos estudios no definen con detalle si éstos lo hacen en plan de ocio o trabajo, sí se puede afirmar que Chile comienza a ganar adeptos en el circuito internacional gracias a valores cotizados entre este tipo de viajeros: atractivos naturales irrepetibles, seguridad y estabilidad económica y política.
¿Para dónde van solos los chilenos? En Viajes Falabella reconocen que el viajero solitario suele elegir (debido al perfil mucho más juvenil de estos usuarios) lugares como Cuzco, el norte de Perú, las playas de Ecuador, Brasil y las de Centroamérica menos explotadas por grandes cadenas hoteleras, como Costa Rica y Guatemala. En Cocha coinciden con Perú, Brasil y Ecuador, y agregan Australia y España.
La guía de viajes Frommer's, por su parte, plantea que los próximos destinos internacionales que sonarán entre los solitarios serán Estambul (capital europea de la cultura del 2010), en Turquía, y Dublín, Irlanda, donde están los habitantes más amigables de Europa, según la comunidad de viajeros Tripadvisor.com.
¿Qué lleva a emprender un viaje en solitario? Las razones prácticas pasan por la dificultad de encontrar partners de viaje -esos que en años de universidad, por ejemplo- resultaba relativamente fácil de reunir para vacaciones. Hoy la realidad es otra: el trabajo, la familia y los propios asuntos dificultan coordinar viajes en grupo. Pero las motivaciones también pasan porque muchos ven este tipo de aventuras como una posibilidad de autoconocimiento y para probarse a uno mismo. Aunque el placer del autogobierno no se alcanza en un par de días de periplo.
AÑOS WEB
Hoy es internet, con su multiplicidad de formatos, la que marca pauta y entrega la mejor información para emprender la aventura. Especialmente blogs sobre los destinos a visitar, puesto que aportan aquellos datos que sólo locales conocen (www.geobeats.com). En ese sentido muchos viajeros prefieren inscribirse en lo que sería la versión blog del alojamiento en viaje, es decir, barato, sin intermediarios entre el oferente y el receptor, y con información de primera mano: CouchSurfing.com, o su versión estadounidense, Hospitalityclub.org, son dos comunidades en las que los usuarios ofrecen desde un sillón hacia arriba en sus propias casas para alojar a visitantes de todo el mundo. La idea, para aquellos que se desplazan con presupuestos límitados, es evitar los paquetes pasajes + hotel, ya que que los precios, por lo general, están pensados para parejas.
YO Y MI OTRO YO
"Me acuerdo de cuando fui a un restaurante indio del Soho de Londres, sola. Y a uno más en Ushuaia. En todos, en algún momento sentía que la gente -camareros y comensales- experimentaban una cierta incomodidad con la presencia de alguien solo", escribe en su blog la viajera periodista argentina Carolina Reymundez. Y he aquí una de las causas que han dado pie para la creación de sitios que reúnen a viajeros solitarios que quieran experimentar lo mejor de ambos mundos, es decir, "juntos, pero no revueltos". Algunos de ellos son, atrevetesolo.com, viajarsolo.com, yporquenosolo.com, cuyo fundador, Santiago Rey, se percató que los viajes que mejor funcionaban eran aquellos en los que las personas no se conocían entre sí.
FUENTE: LA TERCERA.COM