CIPOLLETTI (AC).- Cuando las luces del día no terminaban de irse, la tradicional avenida Alem de esta ciudad cambió de cara. El nuevo sistema de alumbrado público a lo largo de todo el boulevard sorprendió a los transeúntes que usan el sector como paseo o para realizar actividades físicas.
El sábado, cerca de las 19.30, las nuevas luces se encendieron en su totalidad marcando la inauguración formal de la obra que tuvo un costo cercano a 1.400.000 pesos. Se instalaron 210 luminarias y 107 globos entre Mengelle y Circunvalación.
Ahora, sólo restan las tareas de reparación y resiembra del espacio que cuenta, además, con añosos árboles y algunas de las esculturas realizadas en los simposios que se hacen en la ciudad.
Los trabajos que se realizaron fueron diferentes a otros de reconversión del alumbrado público en Cipolletti. En este caso, a la iluminación de la calle y de las viviendas de los frentistas se le sumó la luz sobre el cantero central. Los detalles técnicos de los trabajos indican que se instalaron 5.000 metros de línea subterránea -que evita problemas generados por el viento y de contaminación visual-, con 8 tableros involucrados en el sistema.
La inversión final alcanzó 1.389.152 pesos, financiados en un 60% por ciento con el fondo de obras públicas, que tiene como finalidad solventar proyectos en beneficio de toda la comunidad.
La reconversión alcanzó a la totalidad de la avenida, que fue dividida en dos tramos. Entre Mengelle y Naciones Unidas, el alumbrado sale del cantero central, con lámparas de sodio de 150 watts; mientras que entre Naciones Unidas y Circunvalación, se complementa el alumbrado ubicado en los laterales (sobre la línea municipal), y el cantero central. A lo largo de toda la extensión se colocaron globos de sodio de 150 watts.
Desde mediados del 2004, el alumbrado público cipoleño comenzó a ser reconvertido en barrios periféricos y zonas rurales.
En tanto, también se anunció la reconversión de las lámparas de mercurio a sodio en el barrio Villarino, uno de los más grandes de la ciudad.
