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Las estadísticas son más que elocuentes. De cada 10 pesos que ingresan a las arcas del Estado Nacional en concepto de recaudación, sólo 2,50 pesos son distribuidos a las provincias.

Así lo destaca un reciente informe elaborado por Fundación Libertad y Mautone & Asociados, en el que se destaca que las transferencias nacionales hacia los estados del interior siguen su tendencia decreciente este año, producto de la crisis económica por la que atraviesa el país.

Todo indica que el gobierno nacional continua incumpliendo con las transferencias que debería enviar a las provincias por Coparticipación Federal al no entregar el "piso mínimo" de fondos exigido por Ley. Otra muestra de falso federalismo que termina distorsionando la relación Nación-Provincias.

Distorsiones e inequidades

Otro problema adicional que presenta el federalismo argentino, es la inequidad con la que se asignan los fondos entre las distintas jurisdicciones.

El estudio en cuestión detalla que si se mide el monto de coparticipación por habitante, la más favorecida recibe 7,5 veces más que la mayor perjudicada.

Más aún, las cuatro provincias que menos dinero reciben por habitante (Santa Fe, Córdoba, Mendoza y Buenos Aires) abarcan al 58,8% de la población del país pero obtienen solamente el 41,5% del total de los fondos que el gobierno nacional asigna a las provincias.

Río Negro percibe, en este mismo análisis, un 30% más de recursos coparticipables (per cápita) que Neuquén pese a que esta última provincia entrega anualmente a las arcas nacionales cerca de 2.100 millones de pesos anuales (período 200-2008) contra algo más de 180 millones que cede en promedio y por año (en el mismo período) la administración de Miguel Saiz.

Por ende, se observa que en la distribución de fondos no se sigue ni un criterio devolutivo (darle más fondos a la provincia que más aporta) ni redistributivo (darle más fondos a la provincia más pobre).

Otro ejemplo puede darse comparando dos provincias como Mendoza y Entre Ríos. Siguiendo el primero de los criterios, en la provincia cuyana se recaudaron un 56% más de impuestos nacionales que en Entre Ríos, pero recibió un 14% menos de fondos del Estado. Asimismo, la redistribución se hace a la inversa ya que Mendoza tiene una superficie y población mayor y al mismo tiempo menor nivel de ingreso por habitante y mayor tasa de pobreza.

Por otra parte, remarca el informe, la provincia de Santa Fe, es junto con Córdoba y Buenos Aires, una de las aportantes netas de fondos a la Nación. Es decir, aportan más de lo que reciben. Si bien las provincias mencionadas presentan un mayor dinamismo económico, esto no necesariamente implica que tengan mejores indicadores socio-económicos. Por cierto, la pobreza en Santa Fe alcanzaba en el 2008 al 30,7% de la población, guarismo muy superior al 7,9% de Santa Cruz y al 9,5% de Chubut y Tierra del Fuego, siendo estas jurisdicciones, detrás de Capital, las de mayor ingreso per cápita.

Complejo 2009

En los últimos seis años las provincias y la Ciudad de Buenos Aires obtuvieron fondos nacionales por un valor cercano a los 250.000 millones de pesos, habiéndose multiplicado 3,6 veces lo que recibieron entre 2003 y 2008.

Pese a ello, en el primer semestre de 2009 la dinámica se modificó bruscamente, ya que los fondos enviados crecieron con respecto al mismo período del año anterior a una tasa del 8,6%. Cabe remarcar que entre los primeros seis meses del 2008 y los del 2007 la tasa del crecimiento había sido del 28,1%

Por otra parte, de la totalidad de la recaudación nacional del 2008, se destinó a las provincias y a la Ciudad de Buenos Aires el 25,7%. Un año antes ese guarismo era del 27,6% y diez años atrás, del 33% sin considerar los fondos destinados a la Ciudad de Buenos Aires. Más aún en el primera mitad del presente año el ratio mantiene su tendencia decreciente cayendo al 24,9%. Es decir que de cada 100 pesos que se recaudan de tributos nacionales, la administración nacional se queda con $ 75 y las provincias solamente con $ 25.