Río Negro ya trabaja para obtener el rescate financiero prometido por la Nación: pedirá un préstamo conyuntural y la postergación de los vencimientos por la deuda para reducir las retenciones en la coparticipación.
El ministro de Hacienda, Pablo Verani, abrió el miércoles las gestiones técnicas que se originaron en el compromiso de ayuda asumido el lunes por la presidenta Cristina Fernández ante el gobernador Miguel Saiz.
La provincia está logrando un primer financiamiento con los adelantos de las cuotas del Programa de Asistencia Financiera (PAF). Actualmente, Río Negro sumó nueve transferencias de algo más de 23 millones cada una, por lo cual, se habrá agotado en setiembre o octubre esta disponibilidad, prevista para todo el año pero anticipada frente a las urgencias provinciales.
Poco tiempo dominó el plano financiero en la audiencia de Saiz con la presidenta, acompañada por el Jefe de Gabinete, Alberto Fernández y el ministro de Interior, Florencio Randazzo.
El rionegrino no tuvo que abundar en argumentos para transmitir las dificultades financieras de su provincia. El déficit mensual está cercano a los 40 millones, aunque la Nación recogió el pedido de un auxilio de 25 a 30 millones.
Al margen del siempre comprometido debate por la coparticipación, la asistencia estructural pasará por duplicar el plazo del pago de la deuda que Río Negro mantiene con la Nación, y así reducir a la mitad las retenciones que por ese concepto afronta el Estado provincial.
Por el canje de bonos o por los repetidos programas anuales de ayuda, la Nación concentró el endeudamiento de Río Negro. Las obligaciones totales por los pasivos este año llegarán a 412 millones, de los cuales, 365,5 millones corresponden al Estado Nacional. El 89 por ciento del total. En el 2010, ese pago ascenderá a 567 millones y la Nación reunirá 492 millones. Las actuales retenciones promedios en favor del Tesoro nacional llegan 30,4 millones y rondará el año próximo los 41 millones.
El compromiso nacional de extender los plazos permitirá una buena oxigenación con la reducción a la mitad de esas retenciones.
Verani inició el miércoles las reuniones técnicas. "Ahora, hay que hacer operativas las promesas políticas", dicen en Hacienda. No será fácil, ni tampoco rápido y el riesgo radica en que la demora sumará reclamos provinciales y restará posibilidades. El ingreso de Amado Boudou en Economía no significó grandes cambios de hombres, pero igualmente no existen precisiones que favorezcan las resoluciones. Por ahora, los trámites se centraron en el secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa, un contacto permanente para Río Negro.
Un préstamo coyuntural se adelantará al diseño del rescate por conformar, pero nada ha dicho la provincia, porque la información gubernamental del encuentro de Saiz con la presidente fue muy escueta y Verani recobró su silencio después de que la semana pasada salió a explicar que nada había pasado en su crisis con Saiz. (AV)