RINCÓN DE LOS SAUCES (ARS).- La crisis petrolera de los últimos meses provocó despidos de operarios, reducción de carga laboral, familias que se fueron, comercios que cerraron y toda clase de especulaciones con respecto del futuro para esta ciudad que solo conoce una actividad como eje de su economía.
Con los anuncios del sindicato de petroleros privados, la perspectiva laboral de esta ciudad cambió rotundamente en lo moral pero no así en lo práctico.
Con Guillermo Pereyra de vacaciones por España, después de largas jornadas de negociaciones con la cámara empresarial en Buenos Aires, sus delegados y colaboradores afrontan ahora la delicada tarea de reacomodar a los operarios sin trabajo en las empresas que quedaron en pié después de la crisis y provocar el regreso de casi 1.000 trabajadores a los yacimientos que aun permanecen con mensualidades reducidas en sus hogares.
Pero la pregunta de todos sigue siendo "¿se reactivó Rincón luego de los anuncios?"
"Río Negro" dialogó con dirigentes del gremio de Pereyra que aseguran que "será un proceso largo? los compañeros tienen ahora la seguridad de que no se quedarán sin trabajo, pero hay empresas que se fueron y esos operarios deben ser reubicados", mencionaron.
Consultados sobre cuando volverán los petroleros al campo, la respuesta fue un tanto dubitativa pero finalmente arriesgaron que "para agosto".
En el ingreso a la ciudad se observó la llegada de camiones con maquinaria pesada, de las que se utilizan una vez que la perforación ha comenzado. Sin embargo, en Rincón no hay concreciones.
Las compañías encargadas de la perforación esperan la orden de YPF para salir a trabajar, los sindicalistas esperan que los equipos salgan al campo y finalmente los operarios esperan a sus delegados para volver a los yacimientos.
Ciudades como Catriel o Cutral Co muestran más apertura de las compañías mientras que en Rincón parece existir un borroso panorama que aun no se disipa.
Por otra parte, los comercios fueron gravemente afectados por la falta de dinero en los bolsillos de los operarios. Negocios dedicados principalmente a la gastronomía y elementos industriales, cerraron sus puertas cansados de esperar clientes.
Muchas de las compañías cortaron sus cuentas corrientes con comedores y otros rubros, lo que para muchos representaba gran parte de sus ingresos mensuales. La próxima semana, regresaría Pereyra a la Argentina y a sus funciones como jefe del sindicato. Muchos afiliados y dependientes de la actividad, esperan mayor celeridad en el proceso de regreso a las labores cotidianas, en los ricos yacimientos hidrocarburíferos de Rincón.