El gobernador Jorge Sapag medita en soledad un cambio en el equipo de colaboradores. Esa modificación que está por venir se materializará en agosto y tal vez sea la última que realice en lo que resta de su actual mandato.

La semana transcurrió inundada de versiones sobre modificaciones que fuentes oficiales calificadas se empeñaron en desmentir. Lo hicieron hasta que finalmente Sapag, al término de un acto oficial, reconoció que estaba trabajando en la elaboración de una nueva ley de ministerios.

Este diario publicó, a mediados de mes, una información que decía que el gobierno estaba dedicado a elaborar una nueva estructura ministerial. La noticia no fue desmentida pero sí relativizada por voceros del oficialismo. "No hay ningún plan de cambios por el momento", dijo un funcionario de alto rango cuando se divulgó la novedad.

En la semana que finalizó, la usina de rumores se reactivó y hasta se dieron por ciertas designaciones inexistentes en cargos que aún no fueron creados.

"Hubo operaciones de algunos pícaros", admitió una fuente legislativa del oficialismo que, por antigüedad en el Movimiento Popular Neuquino (MPN), conoce mucho de travesuras y estocadas políticas.

En el gobierno de Sapag existen celos entre algunos ministros, secretarios y subsecretarios. También hay desconfianza en estratos inferiores de menor influencia.

Estas manifestaciones salen a la superficie cuando se avecinan cambios. Y aunque no es la primera vez que ocurre, esta semana -en privado- algunos funcionarios comenzaron a destacar los defectos y a esconder las virtudes de sus pares.

Lo ocurrido es la expresión de una interna que, en estado latente, existe desde hace tiempo en el gobierno de Sapag.

Los cambios que se anunciarían después de las elecciones de concejales en la ciudad de Neuquén -se realizarán el 23 de agosto- definirán también la estrategia del gobernador para transitar meses difíciles, con recursos ajustados y demandas crecientes de los gremios de los empleados públicos.

"Habrá división o agrupación de áreas de gobierno y tal vez enroques; pero no habría que esperar salida de funcionarios", explicaron dos fuentes oficiales consultadas.

Los voceros dijeron que la propuesta definitiva no está terminada y que sólo Sapag sabe cómo será el diagrama de colaboradores para continuar con el gobierno.

El nuevo esquema incluirá la figura de un jefe de gabinete, aunque Sapag va a denominarlo coordinador.

El gobernador considera que abrir una jefatura en la primera línea de conducción puede llamar a equívocos. Sostiene que puede interpretarse que se trata de la creación de un cargo de mayor jerarquía que el de un ministro y aclara que ésa no es la intención del cambio.

Para ocupar ese puesto circula el nombre de un candidato, el del actual secretario de Recursos Naturales, Guillermo Coco. Al respecto, el gobernador expresó esta semana que el nombre de Coco para ese puesto es "sólo una versión periodística".

La reestructuración del gabinete que está en estudio incluirá el concepto de reducción de gasto, confió otro vocero del oficialismo.

El del ajuste es un tema insistente y dominante en el discurso público del oficialismo aunque, en ocasiones, se trata de un mensaje que se contradice con decisiones como la exención de impuestos a las bodegas de San Patricio del Chañar, empresas que siguen solicitando ayuda estatal para seguir funcionando.

Al menos dos de estos emprendimientos que fueron financiados con créditos que se desconoce si se están pagando -el gobierno de Sapag no informa sobre los préstamos del Iadep- ya recibieron beneficios impositivos extraordinarios.

Hay otros pedidos de similares características en camino, confió una fuente oficial. En consecuencia, y de prosperar estos planteos, el polo vitivinícola obtendrá nuevos privilegios, además del colosal respaldo que ya les dio el Estado a los proyectos en la etapa inicial.

Otra vez el petróleo

"Aquí el gesto no acompañó el discurso, pese a que el gobernador cuida prolijamente las formas", observó un dirigente de la oposición. "Y tampoco lo hizo cuando participó del acto de los petroleros privados", agregó.

El lunes pasado Sapag compartió un palco en la calle con el gobernador rionegrino Miguel Saiz y con Guillermo Pereyra, secretario general del sindicato de los petroleros privados. Ambos funcionarios participaron de una asamblea gremial convocada para ratificar el alcance del acuerdo logrado en Buenos Aires que puso fin a un paro de 48 horas por despidos producidos en el sector.

"No están muy claros los motivos por los cuales el gobernador participó de este acto y por qué dejó en manos de Pereyra el cierre del festejo con el discurso final. Cuando se está en el gobierno el protocolo se debe respetar y el último en hablar es el de mayor jerarquía institucional", añadió el hombre de la oposición.

El acto, que reunió a unas cinco mil personas en la Vuelta de Obligado de la ciudad de Neuquén, revela el lugar que ocupa el negocio de los hidrocarburos en la economía local. "Por eso estuvo Sapag, porque el petróleo y el gas forman parte del cimiento de la economía de esta provincia", dijeron desde el oficialismo en defensa del gobernador.

Sapag tenía ganas de seguir festejando. Después de ganar dos elecciones, la de diputados y la interna con el sobischismo por las candidaturas a concejales, intervino en una negociación que puso fin a un conflicto sindical que, si no se frenaba, podía derivar en algo más que una parálisis de la actividad.

Pereyra agradeció el gesto a Sapag con un respaldo público a la reelección del gobernador en el 2011. En el discurso, el sindicalista lo llenó de elogios y ratificó que sigue siendo su aliado, aunque con Pereyra nunca se sabe hasta cuándo se puede contar.

La volatilidad del sindicalista ya la experimentaron los ex gobernadores Felipe Sapag y Jorge Sobisch, con quienes Pereyra también compartió proyectos de gobierno.

Los cambios en el gabinete y la actividad petrolera parecen unirse en un nombre. Si se confirmara la designación de Coco en el nuevo puesto que Sapag piensa crear, el gobierno estaría enviando señales de un nuevo perfil de gestión.

El actual secretario de Recursos Naturales es el funcionario que manejó la negociación de los nuevos contratos petroleros, tiene mucha confianza con el gobernador y se comporta más como empresario que como político.

GERARDO BILARDO

gbilardo@rionegro.com.ar