Felipe Massa estaba en su vuelta más rápida y luchaba por poner su Ferrari en el primer lugar de la grilla para Gran Premio de Hungría. Por delante de Felipinho giraba su compatriota Rubens Barrichello con su Brawn GP y poco antes de la cuarta vuelta del circuito de Hungaroring, ocurrió lo imprevisible.
Un parte de la suspensión del auto de Barrichello se soltó e impactó de lleno en el casco de Massa que circulaba detrás del Brawn GP a 190 km/h. A causa del sorpresivo impacto, la Ferrari del brasileño, dejando huellas visibles de frenada sobre el asfalto, impactó de frente con la pila de neumáticos instalada a la salida de la curva.
El pánico y la incertidumbre se apoderó de todos por un instante en el circuito. Dos ambulancias llegaron rápidamente al lugar del accidente para socorrer a Massa, que estaba consciente y movía sus brazos. Los paramédicos al sacar al piloto de auto, constataron que el objeto había destruido uno de los lados del casco, provocándole un profundo corte en la ceja izquierda.
Massa fue trasladado al hospital AEK de Budapest, con una fractura de cráneo y a poco de ingresar se le efectuó una operación de una hora. El estudio en el hospital reveló un "corte en la frente, una lesión ósea en el cráneo y un traumatismo cerebral", según un comunicado del equipo Ferrari. "Por lo tanto, fue necesaria una operación, después de la cual quedó en observación en cuidados intensivos. Está en coma artificial y mañana (hoy) será despertado", agregó el equipo.
"No sabemos cómo se soltó la pieza", afirmó Ross Brawn, dueño del equipo. Agregó que el resorte de acero en cuestión, pesa entre 700 y 800 gramos y que se trata de un componente estándar con el cual nunca hubo problemas anteriormente. La tapa que sostenía el resorte se quebró previamente.
Por razones de seguridad se cambió el componente en el auto de Jenson Button, compañero de Barrichello.